Los servicios municipales son la tarea fundamental de todo gobierno, la autonomía del municipio radica en el articulo 115 constitucional, sin embargo, algunos de estos servicios están concesionados, el capítulo III de la Ley Orgánica del Municipio Libre prevé que si el municipio esta imposibilitado para prestar algún servicio debe dar cuenta de lo anterior para poder concesionar.
El 30 de enero de 2015, bajo el decreto 953 el Congreso del Estado autorizó al Ayuntamiento de San Luis Potosí concesionar el servicio de alumbrado público, donde PANAVI fue la empresa ganadora de la licitación y se adjudicó el contrato de prestación de servicios hasta por 15 años, es decir, del mes de abril del 2015 hasta abril del 2030, contrato por la cantidad de mil trescientos millones de pesos.
El objeto del contrato consistía en sustituir las luminarias de vapor de sodio existentes por lámparas LED, en un plazo de 90 días hábiles, según lo estipula la cláusula tercera del mismo contrato y durante 15 años dar el servicio y mantenimiento de las luminarias.
Es evidente que el plazo ha trascurrido, 4 años después de la firma del contrato, no tenemos el cambio de las luminarias como se había pactado en su momento, se habla de que la empresa solo ha cambiado alrededor de 4 mil lámparas, de las 47 mil que tiene la ciudad en números aproximados.
En la cláusula décimo novena prevé la recisión del contrato, estableciendo como causal “No entregar en tiempo y forma o no preste el servicio según lo contratado”.
Podemos advertir dos cuestiones, la primera es que la empresa concesionada tiene el derecho del proporcionar el servicio del alumbrado y no existe ningún acto que le haya notificado el inicio del procedimiento de recisión, por lo tanto, está vigente. La segunda es que el municipio no se ha manifestado en ningún sentido, puede solicitar la recisión con la simple declaratoria en sesión de cabildo con la votación de las dos terceras partes de sus integrantes y el dictamen de procedencia del Congreso, o bien un convenio modificatorio donde se reconozca el desface del tiempo de cumplimiento de las obligaciones y se pacte un nuevo calendario, convenio que sería sometido a votación ante Cabildo y tendría que ser aprobado por las dos terceras partes y enviado al Congreso para su respectiva autorización.
Por último, las condiciones del mercado han cambiado, los precios de las luminarias LED son más económicas que en el 2015, por lo que, con miras a una nueva licitación, dicho contrato sería más conveniente con mejores condiciones y mayor ahorro para el municipio, la tarea principal de un gobierno es administrar, lo que conlleva a realizar acciones efectivas para el mejor rendimiento de los recursos. El Congreso ha autorizado la concesión del Alumbrado Público, las condiciones han cambiado y existe una causal que permite volver a licitar, PANAVI lo puede hacer, pero con mejores condiciones. Este seria el siguiente paso, de lo contario PANAVI se convertirá en una bomba de tiempo.
Raymundo Ramírez @Ray_rmz_Urbina