El Papa Francisco acudió este Jueves Santo a la prisión Regina Coeli, en Roma, para convivir con los internos y cumplir con una de sus tradiciones de Semana Santa: pasar tiempo con los más vulnerables. A pesar de seguir recuperándose de una neumonía que recientemente lo tuvo hospitalizado, el pontífice mantuvo su compromiso de estar cerca de los reclusos en estas fechas.
Como cada año, el Papa suele realizar en este lugar el simbólico lavado de pies a 12 personas, recordando el gesto de humildad de Jesús con sus apóstoles antes de la crucifixión. Aunque el Vaticano no confirmó si en esta ocasión se llevó a cabo ese ritual, la visita refleja la importancia que Francisco le da a acompañar a quienes viven en situaciones difíciles.
El pontífice, de 88 años, llegó en un convoy poco antes de las 3 de la tarde y se reunió con 70 internos. Esta actividad se da en el marco de las celebraciones pascuales y como parte de las actividades del próximo Año Santo 2025, que incluirá actos especiales para personas privadas de su libertad.
En días recientes, Francisco ha retomado poco a poco su agenda. Hizo una aparición al final de la misa del Domingo de Ramos y ha visitado de forma discreta algunas basílicas de Roma para orar. Aunque se le sigue viendo frágil, ya no usa los tubos de oxígeno que necesitó durante su hospitalización y, según fuentes vaticanas, su salud mejora gradualmente.
Apenas el miércoles, el Papa recibió en el Vaticano al personal médico que lo atendió durante su estancia de 38 días en el hospital Gemelli. Agradeció su trabajo y pidió seguir rezando por él, mostrando su conocido sentido del humor al elogiar el liderazgo de la rectora del hospital.
Por recomendación médica, Francisco ha delegado la celebración de las ceremonias más exigentes de Semana Santa a otros cardenales. Sin embargo, se espera que este viernes participe con un mensaje escrito en el tradicional Via Crucis en el Coliseo, y aún está por confirmarse si dará su mensaje y bendición “Urbi et Orbi” este Domingo de Pascua.
Tras superar una complicada neumonía, el Papa continúa bajo terapia respiratoria y física en el Vaticano, pero todo indica que, poco a poco, vuelve a sus actividades.
