El recién nombrado papa León XIV habló por primera vez sobre su visión para el papado y explicó el motivo detrás del nombre que eligió. Además, señaló a la inteligencia artificial como uno de los temas más urgentes que enfrenta la humanidad actualmente.
Durante su primera audiencia formal con los cardenales, el pontífice reafirmó su intención de continuar con muchas de las prioridades del papa Francisco, incluyendo la idea de una Iglesia más cercana, abierta e inclusiva, especialmente enfocada en quienes más lo necesitan.
León XIV, originario de Estados Unidos y con raíces peruanas, expresó su compromiso con las reformas del Concilio Vaticano II y destacó que, al igual que su antecesor, busca una Iglesia moderna, en diálogo con el mundo actual. Su elección del nombre “León” está inspirada en el papa León XIII, quien en el siglo XIX fue pionero en abordar los problemas sociales derivados de la revolución industrial. Ahora, dijo, toca responder a los desafíos que plantea la nueva revolución tecnológica: la inteligencia artificial.
“El avance de la inteligencia artificial trae consigo retos muy serios para la dignidad humana, la justicia y el trabajo”, afirmó.
La preocupación por este tema no es nueva dentro del Vaticano. De hecho, el papa Francisco ya había alertado sobre los riesgos de dejar que las máquinas tomen decisiones sin intervención humana. Incluso pidió un tratado internacional para garantizar que la tecnología siga siendo ética y centrada en las personas.
En su discurso, León XIV también se mostró conmovido por la reciente muerte de Francisco y citó su documento “La alegría del Evangelio” como una guía para su pontificado. Reiteró la importancia de escuchar al pueblo, impulsar un liderazgo compartido dentro de la Iglesia y mantener un fuerte compromiso social.
La intervención de León XIV fue cálida y bien recibida. Fue ovacionado por los presentes, quienes lo vieron leer de un texto cuidadosamente preparado, demostrando que su mensaje viene con reflexión y claridad desde el primer momento de su liderazgo.