La paraestatal Pemex se comprometió a mantener firmes los contratos para la construcción de dos hoteles flotantes y avanzar en su proyecto de tener un complejo en el puerto exterior de la Coruña y, eventualmente, firmar en 2013 nuevos con astilleros gallegos.
De acuerdo con un comunicado del Gobierno de Galicia, en el encuentro privado en la residencia oficial de Los Pinos, el presidente Peña Nieto y el dirigente gallego del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, “acordaron reforzar la alianza estratégica” entre Pemex y Galicia.
“La reunión sirvió para constatar que la alianza estratégica de Galicia con Pemex seguirá vigente durante los seis años que Peña Nieto esté al frente de la presidencia mexicana”, subrayó Núñez Feijóo.
Añadió que además la alianza estratégica firmada con Pemex, el 24 de mayo de 2012, sigue ofreciendo nuevas oportunidades a los astilleros gallegos que supondrán más carga de trabajo y, por tanto, más empleo y riqueza para el sector naval.
Asentó que Pemex puede contar con Galicia para sus planes futuros con nuevas operaciones que se unen a la ya firmada por su filial PMI con el astillero público Navantia y con el astillero privado Barreras para la construcción de dos floteles.
Del mismo modo, también renovaron la apuesta de Pemex por establecer en el Puerto Exterior de Punta Langosteira una de sus principales bases logísticas en Europa.
Así, el dignatario gallego resaltó que Peña Nieto no sólo mostró su compromiso con los acuerdos pactados, sino que también puso de manifiesto su receptividad para que se materialicen nuevas operaciones en el futuro.
Afirmó que “Galicia es un socio estable para los planes de crecimiento de la petrolera Pemex”, y atribuyó el mérito a la capacidad, a la experiencia y a la profesionalidad del sector naval, que “sigue convenciendo” con independencia de los cambios directivos producidos en la petrolera o del relieve en el Gobierno Federal ocurrido en las pasadas elecciones mexicanas.
Otras vías de colaboración
Durante el encuentro entre Feijóo y Enrique Peña Nieto, también analizaron la posibilidad de que la cooperación entre ambos países se extienda a otros sectores económicos, entre los que citaron el automotriz, el lácteo, el textil, el eólico o las nuevas tecnologías.
“De este modo, podría generarse economía que permitan a las empresas de ambos dos países ser más competitivas”, apuntó el gobierno gallego.
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