“Esa lucha ya la perdimos”, dijo Fernando Díaz Barriga, coordinador del Centro de Investigación Aplicada en Ambiente y Salud (CIAAS) de la UASLP, en relación a que ya no se permita la construcción de zonas habitacionales en las inmediaciones de la Planta de Zinc.
La empresa Industrial Minera México S.A. de C.V. (IMMSA), reconoce en su manifestación de impacto ambiental, que los fraccionamientos localizados en los alrededores se ubican en un área de riesgo en caso de una explosión de gas Licuado de Petróleo (LP), existente en el complejo.
Es decir, según el documento de la compañía industrial, los fraccionamientos Villa Magna y Horizontes se encuentran en la zona de amortiguamiento prevista para un suceso de esas dimensiones.
Díaz Barriga refirió que en su momento, se llevaron a cabo las acciones para impedir la edificación del complejo habitacional de Villa Magna, sin embargo, no se logró el cometido y “esa lucha ya se perdió”, lamentó.
De acuerdo con el también investigador de la Facultad de Medicina, Minera México en principio estaba en contra de la instalación de Villa Magna.
Sentenció que los residentes limítrofes al lugar deben estar preparados, listos y conscientes de los riesgos que ello implica, además IMMSA tiene “la obligación de educar” a la población que la rodea.
“Esa lucha ya la perdimos. Esa lucha la dimos cuando se iba a instalar Villa Magna, la perdimos (…) Esa lucha ya se perdió, ya ni modo. Lo que hay ahora, es estar conscientes de que se manejan sustancias peligrosas dentro de la planta como ácido sulfúrico, cadmio”.
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