Cinco nuevos magistrados, algunos con vínculos cercanos al gobierno de Claudia Sheinbaum, fueron elegidos para formar parte del Tribunal de Disciplina Judicial (TDJ) de la Ciudad de México, órgano encargado de investigar posibles actos de corrupción y malas prácticas dentro del Poder Judicial capitalino.
Entre los perfiles destaca Nicolás Jerónimo Alejo, exagente del caso Ayotzinapa, quien obtuvo más de 358 mil votos y será el primer presidente del tribunal, con un periodo de ocho años. Jerónimo fue propuesto por el actual gobierno capitalino y ha sido señalado por familiares de los 43 normalistas por su actuación durante el caso. A pesar de ello, encabezará esta nueva instancia judicial.
También fue electo Diego Armando Guerrero García, quien ha trabajado en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y en la UNAM, aunque no tiene experiencia directa en tribunales ni litigios. Obtuvo más de 340 mil votos y podría presidir el TDJ en un futuro.
Otra de las magistradas es Martha Alejandra Chávez Camarena, quien fue parte del Tribunal Electoral local y de la Suprema Corte. Sin embargo, su candidatura fue cuestionada porque no entregó todas las cartas de recomendación requeridas en la convocatoria.
Ixchel Sarai Alzaga Alcántara, cercana a la administración de Sheinbaum, también se integrará al tribunal. Se ha desempeñado en proyectos de obra pública y transparencia en el gobierno capitalino, y es identificada con figuras políticas como Arístides Guerrero, futuro ministro de la Corte.
La quinta integrante es Nahyeli Ortiz Quintero, quien actualmente dirige la Unidad de Género en la Secretaría de Seguridad Ciudadana. También fue funcionaria en la Fiscalía de la CDMX durante la gestión de Ernestina Godoy. En 2021 fue señalada por el despido de una trabajadora que denunció acoso dentro de la institución.
Este tribunal surge tras una reforma judicial local que busca combatir la corrupción entre jueces y empleados del Tribunal Superior de Justicia de la CDMX, actualmente en paro por falta de insumos y mejores condiciones laborales. A partir de esta elección, el TDJ tendrá la misión de vigilar y sancionar a funcionarios judiciales por irregularidades, con cargos que durarán entre seis y ocho años.