“Hay pocas oportunidades para los jóvenes potosinos, el panorama de violencia no les pinta un buen entorno, pues el gobierno sigue sin atender la problemática con políticas públicas que trasciendan los trienios o sexenios y sean incluyentes”, consideró el investigador de El Colegio de San Luis, y académico del Programa de Estudios Políticos e Internacionales, Hugo Borjas García.
Refirió que la Encuesta de Cohesión Social para la Prevención de la Violencia y la Delincuencia 2014, ECOPRED, es la encuesta que ofrece estimaciones de 47 ciudades del país sobre factores de riesgo que enfrentan –especialmente los jóvenes de 12 a 29 años en sus contextos individual, familiar, escolar, laboral y comunitario–, entre los que se encuentran: Acoso escolar, maltrato físico, robo con o sin violencia, amenazas, extorsión, acoso por las características personales del joven y violencia sexual.
Los niveles de violencia entre los jóvenes potosinos aparecen por encima de la media nacional, al respecto, en entrevista Hugo Borjas comentó que es un problema que debe involucrar a todos los sectores de la sociedad para su atención. Mencionó que desde la década anterior, ya se mostraban los crecientes niveles de violencia entre los jóvenes y dijo “la violencia no ocurre por sí sola” y señaló entre los elementos que la promueven, la dinámica familiar en la que los padres de familia pasan menos tiempo con sus hijos, la escasa comunicación entre las familias, la falta de oportunidades de trabajo, la deserción escolar y el clima hostil en las mismas escuelas y otras instituciones, entre otros factores. Dijo que San Luis Potosí “parece que no está atajando la violencia”, consideró, dado que las políticas públicas están más orientadas a atraer las grandes inversiones y empresas, pero poco se ocupan de atender otras condiciones que propician que los jóvenes sean presa fácil de la delincuencia.
Por ello, opinó que es alarmante que no se respete la ley en aspectos tan elementales como la operación de antros y venta de alcohol a escasos metros de centros escolares en transitadas avenidas de la ciudad, refirió como ejemplo.
Cuestionado sobre qué debería hacer el gobierno frente al entorno de violencia que enfrentan los jóvenes, comentó que “si la violencia impacta en varios ángulos en consecuencia las políticas públicas deben responder a varios aspectos como involucrar a los ciudadanos, propiciar mayor coordinación entre autoridades para aplicarlas, que sean de más largo plazo y con metas y resultados concretos”.
Fuente: La Razón