POPOL VUH 098

DESTACADOS, OPINIÓN, POPOL VUH

Por Mario Candia

28/03/25

EL REGIONAL MEXICANO La música regional mexicana ha sido, desde hace décadas, un reflejo de la realidad social del país. Sin embargo, en tiempos recientes, esta expresión cultural ha quedado bajo la sombra de la infiltración del crimen organizado, evidenciando una preocupante simbiosis entre la música regional mexicana y el crimen organizado. ​

NEXOS El asesinato de Jesús Pérez Alvear, conocido promotor musical y exrepresentante de artistas como Gerardo Ortiz y Julión Álvarez, en el restaurante “El Bajío”, ubicado en ella Plaza Miyana, en la colonia Polanco de la Ciudad de México. en diciembre de 2024, puso de manifiesto la profundidad de estos nexos. Pérez Alvear había sido señalado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos en 2018 por presuntamente lavar dinero para el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) a través de su empresa Gallística Diamante, encargada de organizar eventos musicales. ​

LAVADO DE DINERO Gerardo Ortiz, por su parte, ha enfrentado múltiples cuestionamientos sobre sus vínculos con el crimen organizado. En marzo de 2025, Ortiz se declaró culpable en un tribunal de Estados Unidos de conspiración para realizar transacciones con un narcotraficante designado. Su testimonio fue clave en el juicio contra Ángel Del Villar, fundador de Del Records, acusado de lavar dinero para el CJNG. Ortiz admitió haber realizado 19 conciertos entre 2018 y 2020 bajo la gestión de Pérez Alvear, pese a haber recibido advertencias del FBI sobre los vínculos del promotor con el crimen organizado. Según documentos judiciales, Ortiz continuó participando en estos eventos a cambio de sumas millonarias, lo que reforzó las sospechas sobre su relación con el narcotráfico.

SOSPECHAS La relación entre la música regional mexicana y el narcotráfico no es nueva. Artistas como Julión Álvarez también han sido investigados por autoridades estadounidenses por presunto lavado de dinero. Aunque Álvarez ha negado tales acusaciones, la sombra de la duda persiste, afectando no solo su carrera sino también la percepción pública de este género musical. En 2017, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de México ordenó el bloqueo de sus cuentas bancarias, junto con las del futbolista Rafael Márquez, por sospechas de vínculos financieros con el crimen organizado. A pesar de estos señalamientos, Álvarez ha continuado con su carrera, manteniéndose como una figura prominente en la música regional mexicana. ​

CORRIDOS TUMBADOS En tiempos recientes, los exponentes de los llamados “corridos tumbados” han enfrentado situaciones similares. Natanael Cano, pionero de este subgénero que fusiona corridos tradicionales con música urbana, recibió amenazas de muerte en enero de 2025 por parte de una facción del crimen organizado en Sonora, lo que llevó a las autoridades a ofrecerle protección estatal. Asimismo, Peso Pluma, otro destacado intérprete, canceló en septiembre de 2023 varias presentaciones, incluyendo una en Tijuana, tras recibir amenazas directas que advertían sobre posibles atentados si se llevaba a cabo el concierto. Estas situaciones reflejan la creciente presión que enfrentan los artistas de este género por parte de grupos delictivos. ​

CONCIERTOS GRATUITOS Y FERIAS REGIONALES Más allá de las acusaciones individuales, es imperativo analizar cómo los gobiernos estatales han contribuido, consciente o inconscientemente, a esta problemática. Las ferias regionales y conciertos gratuitos, financiados con recursos públicos, a menudo cuentan con la participación de artistas señalados por sus presuntos vínculos con el narcotráfico. La falta de transparencia en los costos y contratos de estos eventos plantea serias dudas sobre la posible canalización de fondos públicos hacia actividades ilícitas. Además, la creciente popularidad de los “corridos tumbados” ha llevado a que festivales internacionales, como Viña del Mar, reconsideren sus alineaciones. En 2024, dicho festival canceló la presentación estelar de Peso Pluma, argumentando que sus canciones podrían hacer apología del crimen, lo que evidencia la preocupación sobre el contenido de estas letras y su impacto en la sociedad. ​

RENDICION DE CUENTAS La opacidad en la contratación de estos artistas y la ausencia de rendición de cuentas por parte de las autoridades estatales alimentan un círculo vicioso donde la cultura y el crimen se entrelazan peligrosamente. Es muy importante que los gobiernos implementen mecanismos de transparencia en la organización de estos eventos populares y conciertos gratuitos, asegurando que los fondos públicos no sean utilizados para promover o financiar actividades que puedan estar relacionadas con el crimen organizado. Además, es fundamental que los artistas sean conscientes del impacto de sus letras y consideren la responsabilidad social que conlleva su influencia en la juventud. ​

Compartir ésta nota:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp