POPOL VUH 114

DESTACADOS, OPINIÓN, POPOL VUH

Por Mario Candia

23/04/25

A INTERNACIONAL DEL LIBRO Este 23 de abril, Día Internacional del Libro, México enfrenta una realidad preocupante: la lectura ha dejado de ser una prioridad cultural y educativa. Los datos más recientes del Módulo de Lectura (MOLEC) del INEGI revelan un descenso sostenido en la población lectora. En 2023, solo el 68.5% de los mexicanos mayores de 18 años declaró haber leído al menos un libro, revista, periódico o material digital en los últimos 12 meses, una caída respecto al 71.6% registrado en 2022. Además, el promedio de libros leídos al año por persona es de apenas 3.4, una cifra que refleja la superficialidad de los esfuerzos institucionales para fomentar el hábito lector. ​

FRACASO Esta tendencia negativa es aún más alarmante en estados como San Luis Potosí, donde la lectura parece estar en franco retroceso. La reciente edición de la Feria del Libro de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) fue un ejemplo de ello. El cambio de sede al Centro Cultural Universitario, alejado del centro histórico y de difícil acceso para muchos, resultó en una disminución notable de asistentes y en una programación que no logró atraer a nuevos públicos. La feria, que alguna vez fue un referente regional en la promoción de la lectura, se convirtió en un evento deslucido, desconectado de su misión original. ​

EDUCACIÓN A nivel nacional, la implementación del nuevo modelo educativo ha dejado mucho que desear en cuanto al fomento de la lectura infantil. Los programas diseñados para incentivar la lectura en las primeras etapas escolares carecen de estructura y continuidad, y no han logrado integrarse de manera efectiva en el currículo escolar. La falta de capacitación docente y la escasez de materiales adecuados agravan la situación, dejando a los niños sin las herramientas necesarias para desarrollar el hábito lector desde temprana edad. ​

PENSAMIENTO CRÍTICO Más allá de los beneficios académicos, la lectura tiene un profundo impacto en el desarrollo personal y emocional de las personas. Como bien lo expone el Dr. Michael Meir, leer expande la mente, fortalece la empatía y mejora la toma de decisiones. La lectura permite a los individuos reflexionar sobre su realidad, comprender otras perspectivas y adquirir herramientas para enfrentar los retos de la vida diaria. En un país fracturado por la violencia, la desigualdad y la desinformación, promover este tipo de habilidades no es un lujo, sino una prioridad urgente. Desatender la lectura es, en términos sociales, una forma de renunciar al pensamiento crítico y perpetuar la vulnerabilidad colectiva ante discursos manipuladores y realidades impuestas.

LA IMPORTANCIA DE LEER En una sociedad como la nuestra, donde la narcocultura y los narcocorridos ganan terreno en el imaginario colectivo, la lectura se presenta como una herramienta fundamental para la formación de ciudadanos críticos y conscientes. Fomentar el hábito lector no es solo una cuestión cultural, sino una necesidad urgente para contrarrestar las narrativas de violencia y superficialidad que dominan muchos espacios. ​

RESILIENCIA Es imperativo que las autoridades culturales y educativas reconozcan el fracaso de las políticas actuales y rediseñen estrategias efectivas para promover la lectura en todos los niveles. Solo así podremos aspirar a una sociedad más informada, crítica y resiliente frente a los desafíos que enfrentamos.

Ich 1.- Estar en el top 5 de eficacia en la administración municipal no es poca cosa, y menos cuando se trata de la percepción ciudadana medida por una encuesta seria como la del INEGI. San Luis Capital no solo aparece en la lista, sino que se mantiene en un firmeen el quinto lugar, lo que habla de una administración que ha sabido sostener el paso. No es que todo esté resuelto, pero al menos hay una percepción de que se está trabajando, eso ya es ganancia en un país donde muchas ciudades viven al vaivén de ocurrencias. 

Hasta mañana.

Compartir ésta nota:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp