Por Mario Candia
30/05/2025
FUGITIVO Este jueves, la Secretaría de Seguridad de Tamaulipas confirmó el hallazgo de cinco cuerpos calcinados en el municipio de Río Bravo. Los cuales corresponden a losintegrantes del grupo musical “Fugitivo”, desaparecidos días atrás en Reynosa. La tragedia, sin embargo, no es un accidente aislado ni un golpe de azar: es la más reciente nota en la sinfonía de terror que se entona cada vez con más frecuencia en el país.
ROBOS CARRETEROS México se ha convertido en un campo minado para quienes hacen del espectáculo su oficio. Los robos a bandas musicales en carretera se han vuelto una constante, como lo vivió Café Tacvba al ser despojados de su equipo en Puebla. Moderatto, Sonido Master, y muchos más han sido víctimas del mismo libreto criminal: artistas asaltados entre casetas y brechas, como si en lugar de una gira musical protagonizaran una serie de emboscadas al margen del Estado. Las carreteras de México ya no son rutas de gira, sino rutas de guerra.
EJECUCIONES EN STREAMING Y si los instrumentos se roban, los cuerpos se desaparecen. Influencers han sido ejecutados en vivo, literalmente. Desde Valeria Márquez, asesinada en plena transmisión en Jalisco, hasta “El Chilango” en Sinaloa, el crimen organizado no distingue entre géneros, formatos ni plataformas. Las redes sociales ya no son un escudo ni un refugio: son una vitrina más para quien se vuelve visible o incómodo.
NARCOCORRIDOS En medio de esta violencia, los corridos tumbados han pasado de la moda al riesgo. Peso Pluma, convertido en ídolo generacional, recibió amenazas directas del Cártel Jalisco Nueva Generación: narcomantas colocadas en Tijuana le advertían que, si se atrevía a cantar en su territorio, sería su última presentación. El concierto fue cancelado. Natanael Cano, otro de los exponentes del mismo género, fue amenazado en Sonora por presuntamente financiar a un grupo rival. La advertencia llegó, cómo no, colgada en un puente, escrita con letras de plomo. Ya no se canta por cantar: se canta bajo la mira.
SIN VISAS Y es que la música, que antes narraba la violencia desde la orilla, hoy se sumerge en ella. En Estados Unidos, Gerardo Ortiz se declaró culpable de realizar conciertos pagados por el Cártel Jalisco Nueva Generación. Ángel del Villar, productor y fundador de DEL Records, enfrenta décadas en prisión por lavar dinero del narco. JuliónÁlvarez, vetado y desvetado, sigue arrastrando el estigma de sus supuestos vínculos con Raúl Flores Hernández. Los Alegres del Barranco perdieron su visa por proyectar imágenes en honor al “Chapo” y al “Mencho” durante un concierto. Y mientras en México les aplauden, en Estados Unidos les
cierran las puertas.
EL BRANDING NACIONAL La industria del espectáculo ha dejado de ser un terreno neutral. Ya no basta con tener talento: hay que saber con qué cártel no te metes, por cuál carretera no transitas, qué corrido no cantas, a quién no nombras. La cultura del narco no sólo se normaliza: se institucionaliza, se canta, se baila, se transmite en vivo. Se convierte en parte del branding nacional.
CRIMINALES Aquí se puede aplaudir a un cantante en las plazas públicas y, al día siguiente, enterrarlo sin justicia. Aquí los músicos desaparecen, los equipos se roban, los influencers se ejecutan, y los criminales… siguen firmando autógrafos desde la sombra.¿Hasta dónde nos llegará el eco de estas notas rotas? ¿Hasta cuándo aguantaremos cantar mientras se incendia el escenario?
Ich. La Feria de Proveeduría en San Luis Capital es, sin duda, un esfuerzo por vincular al sector productivo con nuevas oportunidades. El municipio de la capital está buscandoposicionarse como un actor relevante en el mapa de la competitividad nacional. Sin embargo, estos avances requieren seguimiento, evaluación constante y una mirada crítica que permita consolidar lo alcanzado y corregir lo pendiente.
Hasta el lunes.