Si trabajan, trabajan, y trabajan, pero esas largas horas de dura chamba no se ven reflejadas en sus bolsillos, pues no hay una razón que lo justifique… pero sí un número del que muchos forman parte.
Pues resulta que según contabilizaciones del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 55.4% de las horas que los mexicanos trabajan, las cuales sí aportan a la economía nacional, no son traducidas en alguna forma de pago…
Para darle forma al porcentaje mencionado, se estableció que por cada 10 horas de fletarse en el trabajo, cinco no tienen pago, dura sentencia que consta en la reciente edición de la Encuesta Nacional sobre Uso del Tiempo (Enut), la cual fue elaborada en colaboración con el Instituto Nacional de las Mujeres.
Para sorpresa de casi nadie, el 60% de esas horas sin paga son ofrecidas por las mujeres, mientras que los hombres contribuyen con el 40% restante. El hecho de que el género femenino sea el que chambea sin retribución se eleva hasta el triple cuando sólo se contabiliza el trabajo que se realiza en los hogares: ahí las chicas de 12 años y más contribuyen con muchas más horas que los hombres.
Pero eso no es todo, la situación se agrava cuando los resultados se enfocan en la situación que se vive en las comunidades indígenas, ahí el trabajo no remunerado –tanto de hombres como de mujeres- representa el 58.6% del total de horas laboradas. Nuevamente en este caso el trabajo sin paga que las mujeres realizan es superior al de los varones: cuatro veces más.
Pero bien, después de tantas horas trabajando de “a grapa” siempre existe –debería- sagrados ratos de descanso, estos usualmente la gente los dedica a los medios de comunicación y a la convivencia social… también a rezar –para tener más trabajo- y cuando se puede, a reposar… para que las cosas queden “parejas”, en este rubro los hombre contribuyen con más horas que las mujeres: los hombres pasan en promedio una hora más a la semana en actividades de juego y aficiones.
La Enut fue realizada en áreas urbanas y rurales entre la población –hombres y mujeres- de 12 años y más. Los resultados reflejan la forma en que la gente distribuye actividades como trabajo, estudio, descanso, diversión, cuidado de hijos, labores del hogar y actividades varias… independientemente de que reciban pago o no.
Ahora estaría bueno que entre los políticos hicieran la encuesta para saber cuánto ganan por horas que no trabajan.
Fuente: “Sopitas”