La defensa del fundador de Wikileaks dice estar dispuesta a seguir colaborando con las autoridades.
La Defensa del fundador de Wikileaks, Julian Assange, reiteró hoy que su cliente sigue dispuesto a colaborar con la Justicia sueca para demostrar la falsedad de las acusaciones de agresión sexual que aún pesan sobre él en el país escandinavo.
El abogado Jen Robinson, miembro del equipo legal de Assange, efectuó esas declaraciones después de que la fiscal sueca Marianne Nye anunciara el cierre de una parte de las acusaciones que pesaban sobre él por haber prescrito las denuncias de acoso sexual formuladas por dos ciudadanas suecas.
“Julian no ha ‘evitado’ esta investigación como ella dice. Él se ha ofrecido continuamente a testificar y a cooperar y se ha mostrado dispuesto, incondicionalmente, a ser interrogado en la embajada”, explicó Robinson.
El abogado sostuvo que la obligación de la fiscal es “hacer progresar la investigación” y, según él, “ha fracasado” en ese cometido.
La parte de la acusación contra el activista que queda sobreseída se refiere a los delitos de acoso sexual presuntamente cometidos en 2010, mientras queda pendiente la acusación de violación, que no prescribiría previsiblemente hasta 2020.
La fiscalía sueca ha dejado caer esos casos tras no haber podido presentar a tiempo una acusación formal suficientemente fundamentada para llevarla adelante, ya que no pudo interrogar a Assange, quien está refugiado en la embajada de Ecuador de Londres desde junio de 2012, cuando la fiscalía sueca presentó su demanda contra él.
La alternativa habría sido realizar el interrogatorio en esa embajada, pero para ello la fiscalía precisaba la autorización de las autoridades británicas, además de la de Quito, lo que hasta ahora no obtuvo.
“La conducta (de la fiscal) en esta investigación debe ser seriamente cuestionada. El pasado noviembre, el Tribunal de Apelaciones de Suecia determinó que la acusación actuó indebidamente al retrasar durante cuatro años el interrogatorio de Assange”, indicó Robinson.
Aún así, prosiguió el letrado, Nye “esperó otros siete meses para ponerse en contacto” con las autoridades de Ecuador y “solo presentó una petición formal a mediados de junio”.
El fundador de Wikileaks se ha negado reiteradamente a acudir a Suecia para responder de esos cargos, por considerar que existía el peligro de que se le extraditara a Estados Unidos.
“Todavía existe ese riesgo real y, en estas circunstancias, él no puede abandonar la embajada. Los acontecimientos de hoy ponen de relieve la naturaleza arbitraria de la continua detención de Assange y la necesidad de hallar inmediatamente soluciones para resolver esta situación”, agregó Robinson.
Fuente: Publímetro
