Las autoridades federales han presentado cargos penales contra el alcalde de Nueva York, Eric Adams, en el marco de una extensa investigación que gira en torno a posibles donaciones ilegales recibidas por su campaña de 2021. Este jueves por la mañana, agentes federales realizaron un registro en su residencia, Gracie Mansion, ubicada en el Upper East Side de Manhattan.
Testigos informaron que un vehículo con un letrero que decía “Cumplimiento de la ley federal” se encontraba estacionado afuera, mientras que varias personas vestidas de negocios ingresaban al lugar con maletines y bolsas. Alex Spiro, abogado de Adams, confirmó la presencia de los agentes y acusó a las autoridades de intentar crear un espectáculo, señalando que el alcalde había sido despojado de su teléfono.
Adams no ha sido arrestado y su abogado afirma que está ansioso por comparecer ante el tribunal. Sin embargo, los detalles específicos sobre los cargos en su contra aún no se han hecho públicos, ya que la acusación permanece sellada.
El alcalde, que se convertiría en el primer alcalde en la historia de la ciudad en ser acusado penalmente mientras se encuentra en el cargo, expresó en un video que espera con ansias ser acusado y que las imputaciones son “completamente falsas”. Además, prometió luchar contra los cargos y se comprometió a seguir en su puesto mientras se desarrolla el proceso legal.
Esta situación podría complicar su reelección en 2025, ya que otros demócratas, como el contralor de la ciudad, Brad Lander, ya han mostrado interés en desafiarlo. A esto se suma que la representante Alexandria Ocasio-Cortez ha instado públicamente a Adams a dimitir, argumentando que sería lo mejor para la ciudad.
La investigación federal se ha centrado en la posibilidad de que la campaña de Adams aceptara donaciones ilegales, incluso de gobiernos extranjeros. Se ha indagado sobre su relación con varios países, entre ellos Turquía, Israel y China. Adams, un exoficial de policía, ha negado cualquier irregularidad y ha afirmado que está cooperando con las autoridades.
La situación política en Nueva York ha estado tensa en las últimas semanas, con renuncias de altos funcionarios, incluido el comisionado de policía y la asesora legal de Adams, lo que refleja un clima de inestabilidad en el gobierno de la ciudad.