Con una manifestación que según los organizadores se vio menguada por ser el primer día de vacaciones, con entre 500 y 600 maestros, nuevamente los profesores potosinos de la capital y otras partes del estado salieron a las calles a exigir la derogación de las nuevas leyes que rigen el ámbito educativo. En Rioverde la marcha tuvo números similares, pero durante su trayecto visitaron y exigieron la presencia del diputado federal Óscar Bautista, quien nunca apareció, y luego ingresaron al ayuntamiento, donde el presidente municipal, Alejandro García, tampoco estaba, pese a haber reunión de Cabildo.
Desde las 10 de la mañana los profesores comenzaron a reunirse en las inmediaciones del distribuidor Juárez, buscando sombra entre los puentes debido al fuerte sol mañanero. Poco después de la media, los organizadores los reunieron para iniciar la protesta, la cual inició hasta que juntaron más personas, minutos antes de las 11 de la mañana.
Fue hasta entonces que las Policía Estatal y la municipal iniciaron los cierres de los accesos al distribuidor para prevenir cualquier percance. Poco a poco, los pasos a desnivel que comunicaban a la parte baja de la glorieta y los que van en dirección a la avenida Universidad quedaron bloqueados por los agentes de tránsito.
De esta manera, los maestros iniciaron su marcha, primero dando una vuelta al distribuidor y después partiendo hacia la avenida Universidad, la cual ya había sido despejada. Conforme iban avanzando, la policía vial iba cerrando el paso vehicular con dos cuadras de antelación para prevenir posibles choques entre los manifestantes y los conductores, los cuales no fueron tantos como en otras ocasiones debido al periodo vacacional escolar y la hora del día.
Tras recorrer Universidad y dos lados de la alameda Juan Sarabia, aceleraron el paso debido al calor y llegaron en minutos a San Juan de Dios, donde, al tratar de entrar a las calles colindantes con la plaza de Armas, se toparon con varios puestos ambulantes colocador más temprano, los cuales debieron rodear para poder llegar al primer cuadro.
Una vez en la plaza de Armas, y con el frente del Palacio de Gobierno ocupado por los sindicalistas del SUTSGE y el SITTGE, decidieron bordear por la parte oriental y sur y realizar su mitin enfrente del Congreso del Estado.
Ahí, nuevamente expusieron sus reclamos y avisaron al magisterio que la próxima llamada será a nivel nacional, el 23 de este mes, cuando se buscará que varios contingentes del estado partan a una gran marcha que se realizará en el Distrito Federal, aunque aún discuten si se llevarán a cabo pequeñas concentraciones en los estados de la misma manera que en esta ocasión hubo caminatas en algunos municipios de las diversas zonas de la entidad.
En Rioverde, diputado y alcalde, ausentes
Al mismo tiempo, la marcha realizada en Rioverde concentró a más de 600 manifestantes, quienes recorrieron desde la explanada del antiguo mercado San Juan hacia el Centro, pasando frente a la oficina de enlace de Óscar Bautista Villegas, diputado federal del tercer distrito. Exigieron que diera la cara como uno de los priístas que aprobaron las reformas, pero los empleados del legislador aseguraron que no se encontraba en el sitio.
Tras esto, continuaron caminando sobre la avenida Morelos, en dirección a la plaza Constitución, donde, tras un breve mitin en el que dieron información semejante a la de sus contrapartes capitalinas, un grupo de al menos 40 profesores ingresó a la presidencia municipal del lugar, llamando al alcalde rioverdense, Alejandro García, a pronunciarse respecto a su movimiento.
A pesar de que había una reunión de Cabildo en el momento, los trabajadores del ayuntamiento afirmaron que el edil no se encontraba en el lugar, pero fueron recibidos por el secretario y los regidores, quienes manifestaron apoyar la causa magisterial en lo que sus ámbitos toca. Minutos después, la concentración se desbandó en espera de un nuevo llamado en los próximos días.
Fuente: Jornada
