La iniciativa es impulsada en el Congreso por productores musicales y de cine
Con el surgimiento del movimiento #MeToo en la industria del entretenimiento en los Estados Unidos, muchas mexicanas tomaron la decisión de denunciar a sus presuntos abusadores, entre ellos poderosos productores musicales y de cine.
Sin embargo, en algunos casos se ha juzgado públicamente a los involucrados a través de redes y la prensa sin tener las pruebas necesarias, e incluso, sin haber una denuncia formal de por medio.
En este contexto, el productor Luis de Llano ha impulsado en las últimas semanas una iniciativa conocida como la “Ley Magno”, que busca proteger a los hombres de lo que él considera “injurias” sin fundamento.
Incluso, ha asistido al Senado de la República para presentarla, señalando que su objetivo es establecer juicios más justos y legales, anteponiendo la evidencia por encima del juicio mediático y social.
Y es que ahí aseguró haber sido víctima de ataques ligados a su “éxito, posición, prestigio e imagen” por parte de la cantante Sasha Sokol, aunque no la mencionó directamente en su discurso.
“Yo he sido parte de esta estadística de aquellos que por el simple hecho de tener éxito, posición, prestigio e imagen me han atacado con las más infames injurias y actos lacerantes”
Cabe recordar que a inicios de 2023 la ex Timbiriche lo demandó por daño moral, acusándolo de violentar su “dignidad, integridad física, intimidad y honor” durante su relación cuando ella solo tenía 14 años y él era productor de dicha banda juvenil.
“Fue ilícita y asimétrica por la diferencia de edad y el rol jerárquico que ejerció”, declaró entonces la víctima.
En septiembre pasado, Sokol ganó el juicio y desde entonces De Llano buscar impugnar la decisión judicial, aduciendo enfrentar una campaña con intereses “oscuros y perversos”
En otras palabras, con la Ley Magno ya no se permitiría que se hagan acusaciones de acoso y abuso sexual sin contar con las suficientes pruebas.
Coco Levy se suma a la iniciativa
El productor de cine Jorge ‘Coco’ Levy se ha sumado para promover la Ley Magno, después de que la actriz Danna Ponce lo acusó de acoso y luego retiró su denuncia en enero de este año. Ella desistió dedespués de llegar a un acuerdo económico con él.
Sin embargo, ya era muy tarde, pues la empresa Videocine despidió a Coco Levy sin indemnización alguna a pesar de los 30 años de trayectoria que tenía con ellos.
A pesar de no haber confirmado su participación en dicha iniciativa, señaló la facilidad con la que los medios y redes sociales juzgan y exponen a los acusados antes de un veredicto judicial
“En el momento en que se hace una acusación… en la primera mención de la acusación que se hace contra los hombres de este país, somos culpables”
“Los medios, las redes sociales exponen sin que haya más que acusación, sin que haya más que un rumor, que una presunción”, comentó Levy en entrevista para Ventaneando.
Mientras tanto, ha emprendido acciones legales contra Videocine, alegando que la compañía utilizó la acusación como pretexto para terminar su relación laboral.
Cómo identificar el acoso sexual
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), El acoso sexual es una conducta no deseada de naturaleza sexual, que hace que la persona se sienta ofendida, humillada y/o intimidada. Se puede presentarse de distintas maneras:
1. Como chantaje: cuando se condiciona a la víctima con la consecución de un beneficio laboral −aumento de sueldo, promoción o incluso la permanencia en el empleo− para que acceda a comportamientos de connotación sexual.
2. Como ambiente laboral hostil en el que la conducta da lugar a situaciones de intimidación o humillación de la víctima. Los comportamientos que se califican como acoso sexual pueden ser de naturaleza:
• Física: violencia física, tocamientos, acercamientos innecesarios.
• Verbal: comentarios y preguntas sobre el aspecto, el estilo
de vida, orientación sexual, llamadas de teléfono ofensivas.
• No verbal: silbidos, gestos de connotación sexual, presentación de objetos pornográficos.
Otros ejemplos:
• Contacto físico innecesario y no deseado.
• Observaciones molestas y otras formas de acoso verbal.
• Miradas lascivas y gestos relacionados con la sexualidad.
• Petición de favores sexuales.
• Insultos, observaciones, bromas e insinuaciones de carácter sexual.
• Comentarios, bromas, gestos o miradas sexuales.
• Manoseos, jalones o pellizcos en forma sexual.
• Restregar a la víctima contra alguien de un modo sexual.
• Propagar rumores sexuales acerca de la víctima.
• Jalar la ropa de manera sexual.
• Mostrar, dar o dejar imágenes sexuales, fotografías, ilustraciones, mensajes o notas sexuales.
• Escritos, mensajes (pintas, grafitis) sexuales acerca de la víctima, en paredes de los baños, vestuarios, etc.
• Forzar a besar a alguien o a algo más que besar
• Llamar a la víctima “gay” o “lesbiana”.
• Espiar mientras se cambia o está encerrada en un sanitario.
• La utilización o exhibición de material pornográfico.
– Infobae