Las nueve personas asesinadas el pasado miércoles en la Iglesia Metodista Episcopal africana Emanuel, en la ciudad de Charleston, Estados Unidos, compartieron la última hora de sus vidas con Dylann Roof, el hombre que los asesinaría.
En medio de la sesión de estudios bíblicos, el hombre de 21 años de edad se levantó y comenzó a disparar contra ellos.
Entre los muertos -seis mujeres tres hombres- había pastores, graduados, bibliotecarios, entrenadores y miembros de familias cercanas al templo metodista.
Esto es lo que se sabe de las víctimas.
Cynthia Hurd
Cynthia Hurd tenía 54 años, 31 de ellos trabajando para la Biblioteca Pública del Condado de Charleston. El domingo cumpliría 55 años.
“Cynthia era una servidora incansable de la comunidad, que pasó su vida ayudando a los residentes, asegurándose de que tuvieran todas las oportunidades de educación y crecimiento personal”, escribió la biblioteca en su página web el jueves.
La sucursal de la biblioteca donde trabajaba será rebautizada como Biblioteca Regional Cynthia Hurd en su honor, según un miembro del consejo de la ciudad.
Su hermano, el exsenador del estado de Carolina del Norte, Malcom Graham, dijo que era un pequeño consuelo que su hermana muriera en la iglesia que tanto amaba. Allí había ido a todos los domingos y miércoles desde que eran niños.
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Clementa Pinckney
El senador del estado de Carolina del Sur, Clementa Pinckney, de 42 años de eda, era pastor de la iglesia desde 2010 y líder de la comunidad. Estaba casado y era padre de dos hijos.
Pinckney había estado predicando desde que tenía 13 años. Su rápido ascenso político lo mostró como una estrella demócrata en un estado mayormente republicano.
A principios de este año prestó su voz en una campaña para fomentar el uso de cámaras en patrullajes de policías, luego de que un oficial le disparara a Walter Scott, un hombre negro desarmado.
“Siempre sentí que Dios me había llamado a servir dentro de la iglesia”, le dijo al Charleston al periódico local Post and Courtier en 2010. “Este siempre ha sido mi hogar”.
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Sharonda Coleman-Singleton
Sharonda Coleman-Singleton era fonoaudióloga, pastora y entrenadora de atletismo en una escuela.
Fue parte del equipo de atletismo de la Universidad Estatal de Carolina del Sur, según el Post and Courier.
Uno de sus tres hijos, Chris, siguió sus pasos deportivos y hoy es jugador de béisbol en la Charleston Southern University.
“Rueguen por mi mamá, por favor”, tuiteó la noche del miércoles.
Quienes la conocieron aseguran que siempra estaba con una sonrisa en la cara.
“Te queremos entrenadora Singleton. Gator Nation está donde está hoy gracias a tu liderazgo Estás en nuestros pensamientos y oraciones…”, publicaron los Goose Creek Gators, el equipo que entrenaba, en su página de Facebook.
Tywanza Sanders
Tywanza Sanders se acababa de graduar como licenciado en Administración de Empresas de la Universidad de Allen, en Carolina del Sur, una institución privada históricamente negra.
Sanders se describía a sí mismo como un “poeta, artista y hombre de negocios” en su cuenta de Instagram.
“Era un estudiante tranquilo, muy conocido, que se había comprometido a su educación. Tenía un espíritu cálido y servicial”, comentó Flavia Eldemire, vocera de la universidad en un comunicado.
Tessa Spencer, presentadora de noticias del canal local ABCNews4, le dijo a BuzzFeed que Sanders trabajaba con su hermano en una peluquería y que ella lo había visto hace sólo dos días.
“Una vida no es importante excepto en el impacto que tiene en la vida de otros”, fue el último mensaje que Sanders publicó en Instagram antes de morir, citando al jugador de béisbol Jackie Robinson.
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Ethel Lance
Ethel Lee Lance pasó 30 de sus 70 años trabajando para la iglesia donde murió.
Tuvo cinco hijos, siete nietos y cuatro bisnietos.
“No sé que voy a hacer. Mi abuelita era el corazón de la familia. Ella era una cristiana, trabajadora (…) Podía llamarla para cualquier cosa. No hay nadie más así”, le dijo su nieto al Post and Courier.
Ella sirvió como sacristán en la iglesia y amaba la música gospel.
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Depayne Middleton-Doctor
Depayne Middleton-Doctor, de 49 años, era madre de cuatro hijas y ministra de la iglesia, a la que recién se había unido este año según el Post and Courier.
Trabajaba como consejera de matrículas en el campus de Charleston de la Southern Wesleyan University.
“Mi hermosa ave cantora. Esto es difícil de digerir. Yo realmente te extraño, cariño. Tu hermosa personalidad, tu risa, su sonrisa y tu amor para todos”, escribió una de sus amigas.
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Susie Jackson
Susie Jackson, de 87 años, era prima de Lance y uno de los miembros más antiguos de la iglesia, según el Post and Courier.
“Es difícil de procesar que mi abuela tuviera que dejar este mundo de esta manera”, le dijo su nieto, Tim Jackson, a ABC News en Cleveland.
Él la describe como una “persona cariñosa, que se entregaba” con una “gran sonrisa”.
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Daniel Simmons Sr
Daniel Simmons Sr, de 74 años, fue la única víctima que murió en el hospital y no en la iglesia.
Iba todos los domingos y miércoles a la iglesia Emmanuel
Sh’Kur Francis, un ministro bautista, tuiteó el jueves: “No puedo creer que el Rev. Dan Simmons se ha ido. Este hombre me bautizó, casó a mis padres y habló en el funeral de mi abuela”.
Myra Thompson
Myra Thompson, de 59 años, era pastora de la iglesia y miembro de la hermandad de mujeres Delta Sigma Theta.
Era la esposa del reverendo Anthony Thompson, de la Iglesia Anglicana en Norteamérica.
Fuente: BBC.
