El Real Madrid, con un Vinícius deslumbrante y un tridente ofensivo imparable, conquistó su cuarta Copa Intercontinental tras vencer al Pachuca. Este triunfo lo convirtió en el primer club en la historia en lograr tal hazaña, mientras que Carlo Ancelotti alcanzó el título de técnico más laureado en la historia del club blanco.
El partido inició con un Pachuca lleno de valentía y determinación, presionando alto y dificultando al Madrid en los primeros minutos. Thibaut Courtois fue clave para mantener el marcador en cero con intervenciones brillantes. Sin embargo, la diferencia de calidad entre ambos equipos pronto salió a relucir. A medida que el Real Madrid aumentaba la velocidad de su juego, los espacios comenzaron a aparecer, especialmente con un Vinícius inspirado tras ser reconocido como el mejor jugador de 2024 por los premios The Best.
El primer gol llegó tras una jugada magistral del brasileño, quien dejó al portero rival en el camino y asistió a Mbappé para abrir el marcador. Fue un momento especial para el francés, quien selló su revancha en el estadio donde había perdido una final mundialista. Poco después, Mbappé buscó ampliar la ventaja con disparos potentes, pero sería Rodrygo quien sentenciara el encuentro en la segunda mitad. Su gol, un disparo a la escuadra tras una jugada llena de amagues, dejó al Pachuca sin respuestas.
A pesar del marcador adverso, los Tuzos demostraron orgullo hasta el final, probando nuevamente a Courtois con disparos peligrosos de Bryan González y Rondón. Sin embargo, la calidad defensiva y ofensiva del Madrid marcó la diferencia. Ancelotti aprovechó para proteger a jugadores como Mbappé y Camavinga, recién recuperados de lesiones, mientras el equipo manejaba el ritmo del partido.
La cereza en el pastel llegó con el gol de Vinícius. Tras varias oportunidades, incluido un regate espectacular que casi termina en uno de los goles del año, el brasileño finalmente anotó desde el punto penal, premiando su extraordinaria actuación en una noche inolvidable.
Con este título, el Real Madrid no solo refuerza su legado en la historia del fútbol, sino que también demuestra su capacidad para responder en los momentos clave. Mientras tanto, Pachuca se retira con la frente en alto tras haber llegado hasta la final y mostrar un gran espíritu competitivo frente a un gigante del fútbol mundial.