La bebé conocida como “milagro” luego de que un convoy del Metro le pasara encima durante el suicidio de su mamá, en la estación Puebla, fue reclamada por su abuela, pero no se le ha entregado debido a que aún no concluye la prueba de genética para probar su parentesco.
La abuela materna, María de Lourdes Pulido, solicitó la guardia y custodia de la bebé, pero sólo mostró la hoja de alumbramiento, según datos de la Procuraduría capitalina.
No fue registrada ni bautizada por su mamá, ahora occisa y quien padecía esquizofrenia.
El comprobante de alumbramiento no fue suficiente para permitirle a la abuela ver a la menor que se recupera en el hospital Pediátrico de Legaria, ni mucho menos llevársela.
Por ello se determinó que será una prueba de genética la que demuestre si son familiares.
La Fiscalía Especializada en Niños, Niñas y Adolescentes es quien lleva el caso y la que ordenó que se hagan los estudios que requerirán de dos a tres semanas.
La abuela fue informada de la mejoría de la niña, luego de registrar un traumatismo craneal simple por la caída a las vías, pero que no requirió intervención quirúrgica.
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