Estela Ambriz Delgado
Pese a ser desmentido por autoridades de la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado (SEGE), el rector de la Universidad Potosina (UP), Arturo Segoviano García, aseguró a padres y alumnos que su institución se encuentra en estado regular, y aunque se le indicó que por ley no puede retener la documentación de quienes quieran darse de baja, insiste en cobrarles 2 mil pesos por el trámite.
Este viernes 14 de junio, estudiantes y sus familias asistieron a una reunión con el rector en las instalaciones ubicadas en avenida Carranza, a la que se negó la entrada de los medios de comunicación bajo el argumento de que se debería agendar posteriormente una entrevista, acompañados de Benito Ramos de la Subsecretaría General de Gobernación, y María Isabel Sánchez García, coordinadora general de Planeación y Evaluación de la SEGE.
Entre los asistentes estuvo Alan Cornejo, quien apoya las familias afectadas, y comentó que el rector continuó en su postura de que el Registro de Validez Oficial (RVOE) de la carrera de Medicina tiene toda la validez y no hay nada de qué preocuparse. Sin embargo, la autoridad educativa lo desmintió, le dijo que el registro no cuenta con matrícula y se encuentra suspendido desde el 18 de abril de 2024.
Ante la actitud de Segoviano García de seguir con su mismo discurso, los padres que quieren dar de baja a sus hijos para buscar les revaliden en otra institución, le pidieron apoyo para que, dada la ilegalidad en que se encuentra su institución, omitiera el cobro de las bajas y les regresara sus documentos, pero respondió que eso no era posible dado que ya había hecho una inversión en los estudiantes.
En este tema, la funcionaria de SEGE le indicó que por ley no podía retener los documentos de estudiantes y tiene la obligación de entregarlos, a lo que en respuesta Segoviano García hizo caso omiso y que los que se quisieran dar de baja se les mantendría el precio de 2 mil pesos.
Al respecto, Alan Cornejo hizo mención de que anteriormente las bajas tenían un costo de mil 500 pesos, pero ya que el director ve venir muchas deserciones, aumentó el precio a 2 mil.
“La única propuesta que presentó el rector fue que los alumnos que no confiaran en él se dieran de baja y se fueran”.
Por otra parte, señaló que se entregó evidencia a SEGE de que al 6 de junio la Universidad aún inscribe estudiantes de nuevo ingreso, y la autoridad dijo que se haría acreedor a una sanción al no respetar la suspensión en que se encuentra.
Asimismo, el ciudadano informó que tendrán una nueva reunión con SEGE el martes 25 de junio para dar información sobre la posibilidad que tienen los alumnos para que revaliden en otras escuelas, si se pide la baja y un certificado parcial de materias.
Sin embargo, los estudiantes que estaban por finalizar su internado y horas de práctica no podrán saber su situación hasta que se contacte con autoridades de la Secretaría de Salud del Gobierno Federal, pues la instancia a nivel estatal se deslindó por completo y dijo no tener injerencia.
Alan Cornejo denunció también que el 13 de junio por la noche intentaron amedrentarlo por medio de una llamada, en la que le dijeron no acudiera a la reunión que hoy se llevó a cabo o sería golpeado. Además de que durante la reunión pretendieron sacarlo por debatir los argumentos del rector, pero un grupo de padres de familia impidió que dos escoltas se lo llevaran.
Finalmente, dijo que al no haber ninguna disposición de Arturo Segoviano, las familias no ven otra opción más que emprender la demanda por fraude en los próximos días.
