El domingo pasado, ciudadanos, familias completas y trabajadores de diversas empresas se unieron en una jornada masiva de reforestación en el Parque de Morales, también conocido como “Juan H. Sánchez”. Esta actividad, que contó con la participación entusiasta de la comunidad, será repetida el próximo fin de semana.
Los organizadores de la jornada dispusieron de 550 árboles para ser plantados en el parque. Algunos ejemplares fueron llevados a casa por los asistentes, con el compromiso de cuidarlos adecuadamente. Para ello, se llevó un registro detallado de cada uno de los árboles.
Tras el registro, los participantes pudieron elegir el área adecuada dentro del parque para plantar el árbol de su elección. Aquellos que necesitaban orientación recibieron asesoramiento de expertos para asegurar una plantación exitosa.
El Parque de Morales, próximo a cumplir cien años, ha sido objeto de atención especial por parte de las autoridades municipales como parte de los preparativos para esta significativa celebración. El próximo sábado 27 y domingo 28, se llevará a cabo un evento similar, con acceso por la entrada posterior del parque, frente al Club de Leones.
La asociación civil Pro Forestal y los voluntarios presentes se unieron para plantar árboles como parte de los esfuerzos de reforestación de este importante parque, que ha sido afectado por la prolongada sequía.
A pesar de contar actualmente con más de cuatro mil árboles, muchos de ellos han perdido la vida y representan un riesgo para los visitantes. Por esta razón, se planifica su tala. El resto de los árboles se riega diariamente con agua tratada para su conservación.
Además de la reforestación, el personal municipal llevó a cabo labores de limpieza y recolección de excedentes, como parte de las acciones preparatorias para la conmemoración del centenario del parque.
En cuanto a otras labores de rehabilitación, se informó que el área de juegos infantiles está siendo restaurada, con la conservación y rehabilitación de juegos clásicos, así como la instalación de nuevos. Aunque, en una inspección realizada en la zona, se observó que, aparentemente, todo sigue igual, excepto en la zona de los patos, conocida como Villa Cuac, donde se brinda atención y alimento a estas aves.
