Este miércoles, en la víspera del Día de la Candelaria, productores y vendedores de tamales reportaron menos pedidos que el año pasado. La causa principal: el aumento significativo del tradicional antojito que ya se vende entre 15 y 17 pesos la pieza.
Se consultó a vendedores de tamales del norte, centro y sur de la capital para conocer la demanda del producto para este 2 de febrero, cuando las y los padrinos del Niño Dios deben pagar la deuda contraída en la partida de la Rosca de Reyes, el 6 de enero.
En la mayoría de los casos, el comentario fue el mismo: “sí ha habido pedidos, pero no como el año pasado. Principalmente, porque ya se les hacen muy caros”.
Y es que hace un año, los tamales se podían conseguir en 12 o 13 pesos e incluso menos, si se compraban “por mayoreo”, es decir, a partir de 30, 40 o 50 piezas.
En este 2023, un solo tamal cuesta entre 15 y 17 pesos, sin garantía de que “esté bueno”, por lo que muchas personas optaron por no comprar o aminorar la cantidad que normalmente llevaban al hogar.
En el caso de los convivios en oficina, el costo se reparte “por coperacha” entre los interesados.
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