El Consejo Ciudadano de la Comisión Estatal de Derechos Humanos reprobó las declaraciones del vocero de la Arquidiócesis, Juan Jesús Priego quien comparó el aborto con el desmembramiento de una mujer en la vía pública.
Hizo un llamado a la sociedad potosina “para concientizarnos y emitir declaraciones respetuosas de los derechos humanos de las mujeres, que en lugar de fomentar el desprestigio y enjuiciamiento hacia las mujeres que deciden realizar la interrupción de un embarazo, fomenten el respeto del derecho a una vida libre de violencia”.
Detalló que en México cada día se registran al menos 9 feminicidios de mujeres o niñas dando una total de 3 mil 580 muertes de mujeres violentas al año, “el feminicidio constituye la máxima expresión de violencia hacia las mujeres por razón de género, se trata de crímenes perpetrados en un contexto de desigualdad patriarcal que favorece su invisibilidad e impunidad”.
Agregó que en San Luis Potosí se vive un escenario desalentador, “pues este Organismo Constitucional Autónomo tuvo conocimiento de 34 casos de muertes violentas de mujeres en 2017, y 50 en 2018, por lo que se han realizado esfuerzos por visibilizar la situación del respeto de los derechos humanos de las mujeres en particular en los casos de feminicidios y resulta preocupante que existan este tipo de comentarios que lejos de abonar a la indignación y reclamo por la justicia y reparación de las víctimas, realicen una comparación desafortunada que trivializa y minimiza la vida de las mujeres y el derecho de éstas a vivir libres de violencia”.
Consideró desafortunadas las declaraciones de Priego, que “constituyen un ataque a los derechos humanos de las mujeres por generar discriminación y normalización de la violencia bajo un contexto estereotipado y de criminalización, pues el derecho al libre desarrollo de la personalidad contempla, entre otros, tanto el derecho de procrear como el número de hijos y el momento de decidir ser madre o no; es así que, la Corte Interamericana de Derecho Humanos resolvió que los límites al ejercicio de la salud reproductiva constituyen violaciones al derecho al libre desarrollo de la personalidad, por lo que la decisión sobre la interrupción del embarazo se encuentra protegida prima facie por este derecho”.
El organismo se dijo respetuoso de la postura ética que tenga cualquier grupo religioso en este tema, “no obstante, consideramos que la comparativa realizada, lejos de promover una postura moral, atenta contra las mujeres y las niñas desde el contexto de la necesidad de unirnos a la estrategia de erradicación de las causas de las violencias, máxime en el contexto de emergencia en que se encuentra nuestro Estado por la declaratoria de alerta de violencia contra las mujeres”.
Con información de: Pulso
