Ante la incapacidad de las autoridades ministeriales por la pronta procuración de justicia en el caso de Luis Alberto Dávila Monsiváis, de 37 años, quien perdió la vida a manos de Jesús Iván Palacios, de 18, vecinos de la colonia Guerrero han mostrado su repudio incendiando por segunda ocasión el domicilio donde moraban los presuntos homicidas.
Los moradores del sector han mostrado su descontento dañando el domicilio, donde el presunto homicida y su parentela convivían. Vecinos aseguraron que la familia Palacios abandonó la casa el sábado por la noche, horas después de que fueron liberados por las autoridades.
“No sabemos quién está quemando la casa, pero esta es la segunda ocasión en que sucede, solamente queremos justicia para nuestro vecino, que las autoridades se pongan a trabajar, ya tenían al asesino y lo dejaron salir”, aseguraron los testigos de la quemazón.
Aparentemente, y según lo que refirieron los pobladores de la colonia, el señalado y sus familiares, Jesús Palacios y Juan Daniel Palacios, quienes participaron el sábado pasado en la gresca que le costó la vida a Luis Alberto Dávila Monsiváis, huyeron tan pronto recobraron su libertad, abandonando el domicilio, muebles y ropa a su suerte.
El sábado pasado, Dávila Monsiváis fue lesionado de muerte con un bate de beisbol por Jesús Iván Palacios, los vecinos aseguraron que todos los moradores de la casa siniestrada son personas conflictivas.
Fuente: Zócalo.