Diez días después de su ascenso, rescatistas encontraron el cuerpo de José Luis Díaz Morales, el último alpinista del grupo “BarranCracks” que permanecía en calidad de desaparecido en el Pico de Orizaba.
A las 16:27 horas del martes 27 de febrero, la Coordinación General de Protección Civil informó que se localizó un cuerpo en la cara sur del volcán, a cuatro mil 910 metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, aunque de manera preliminar se presumía que se trataba de José Luis, esto tenía que ser confirmado por las autoridades correspondientes.
Elementos de Protección Civil Estatal, de la Policía Municipal de Atzitzintla, integrantes del Club Alpino de Ciudad Serdán y voluntarios llevaron a cabo los trabajos de descenso del cuerpo para posteriormente entregarlo a las autoridades en la Presidencia Municipal.
José Luis, de 57 años de edad y originario de Zapopan, Jalisco, era el único de los 12 alpinistas que faltaba por encontrar.
El Secretario de Gobernación, Javier Aquino, escribió en X que la Fiscalía confirmó que el cuerpo que se encontró en el Pico de Orizaba es de José Luis Díaz Morales.
A su búsqueda, se sumó una brigada de la Secretaría de Medio Ambiente originaria y conocedora de la región, guías expertos y diversas delegaciones de la Cruz Roja Rescate Alpino. Las personas que lo buscaban tomaron la decisión de establecer un refugio para no perder más tiempo en su ascenso y descenso.
Incluso, el Gobierno de Puebla puso a disposición dos helicópteros y se contempló usar un dron, pero todo dependía de las condiciones del viento.
“Sólo faltas tú, José Diaz. Te queremos de regreso, Joche. Aún te estamos esperando tus amigos, familiares y amigos de la barranca”, escribieron en redes sociales.
ANTES DE ENCONTRAR EL CUERPO, RESCATISTAS HALLARON EL CELULAR DE JOSÉ LUIS, ÚLTIMO ALPINISTA DESAPARECIDO
El celular de José Luis lo encontraron el 21 de febrero, cuando los rescatistas descendían el cuerpo de Luis Flores Gómez, el guía y fundador del grupo “BarranCracks” a cuatro mil 600 metros sobre el nivel del mar.
El cuerpo de Jessica, la primera alpinista localizada sin vida, se halló a cinco mil metros sobre el nivel del mar. Los alpinistas que sobrevivieron presentaron raspaduras, principios de hipotermia y deshidratación.
El sábado 17 de febrero, 12 alpinistas ascendieron al Pico de Orizaba, pero la entrada del frente frío número 35 complicó su descenso. Sólo uno logró bajar por la comunidad de Miguel Hidalgo, en Tlachichuca, y otros seis lo hicieron con rumbo a Atzitzintla.
Cinco se reportaron como desaparecidos. Durante la noche del domingo, se informó que tres de estas personas fueron localizadas, lamentablemente una sin vida: Jessica.
La búsqueda de Luis y José Luis se complicó por las condiciones y extendió hasta este día.
Sin Embargo