La empresa General Motors anunció que trasladará parte de la producción del modelo Chevrolet Equinox, que actualmente se ensambla en San Luis Potosí, a una planta en Kansas City, Estados Unidos. La decisión fue atribuida directamente a los aranceles del 25% impuestos por el presidente Donald Trump a los vehículos importados desde México.
Este movimiento representa un nuevo revés para la industria automotriz potosina, ocho años después de que la empresa Ford cancelara la construcción de una planta en Villa de Reyes en 2017, también bajo presión de Trump.
GM detalló que invertirá 4 mil millones de dólares en sus plantas de Michigan, Kansas y Tennessee para aumentar la producción de vehículos dentro del territorio estadounidense a 2 millones de unidades al año. Entre los modelos que regresarán a Estados Unidos están el Equinox y el Chevrolet Blazer, actualmente fabricados en México, en plantas como la de Ramos Arizpe y San Luis Potosí.
La planta potosina de Villa de Reyes, inaugurada en 2008 y ensambladora del Equinox desde 2018, era la única en América del Norte que producía ese modelo hasta ahora. La transferencia de producción comenzará a mediados de 2027.
Hasta el momento no se ha informado si habrá consecuencias laborales para los más de 6,700 empleados de la armadora potosina.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, confirmó en su cuenta de X que GM le aseguró que sus plantas en México seguirán operando normalmente y que no hay previsión de despidos ni cierres, incluyendo la de San Luis Potosí.