El actor Michael Douglas revela a ‘The Guardian’ que el tabaco no fue el responsable de su enfermedad de garganta, sino el virus del papiloma humano
A sus 68 años, la estrella de la película Bajos Instintos, Michael Douglas, reveló que el cáncer de garganta que le diagnosticaron hace tres años lo contrajo al practicar sexo oral.
En entrevista para el diario británico The Guardian, el actor hollywoodense, recientemente aclamado por su papel en la cinta Behind The Candelabra, junto a Matt Damon, explicó abiertamente los antecedentes de su enfermedad, que en un principio se llegó a pensar que era mortal.
“No, no me arrepiento de haber fumado y bebido. El cáncer que yo tenía lo causó el virus del papiloma humano, que viene en realidad delcunnilingus“, aseguró el actor al periódico inglés.
El esposo de la actriz Catherine Zeta Jones reconoció que llegó a pensar que el estrés pudo ayudar a desarrollar la enfermedad.
“Me preocupé por si el encarcelamiento de mi hijo desencadenó el cáncer. Pero lo cierto es que es una enfermedad de transmisión sexual. Y si la tienes, el cunnilingus también puede ser la mejor cura”, ironizó.
El VPH, el virus de transmisión sexual más conocido como causa de cáncer de cuello uterino, anales y verrugas genitales, se piensa que puede ser responsable de una proporción creciente de los cánceres orales.
A un paso de la muerte
A Douglas le diagnosticaron el cáncer en agosto de 2010, después de muchos meses con malestar en la garganta. Tras pasar por varias consultas, el actor se fue a ver al médico de un amigo en Montreal.
“Siempre recordaré la expresión de su cara al decir: ‘necesitamos un biopsia…’, ya que según el actor, tenía un tumor del tamaño de una nuez debajo de la lengua, “que ningún otro especialista había visto previamente”.
Cuando el doctor tuvo los resultados le diagnosticó un cáncer en la cuarta etapa (la quinta es, directamente, la muerte). A partir de entonces se embarcó en un tratamiento feroz: ocho semanas de quimioterapia y radiación. Y perdió 20 kilos porque se negó a utilizar un tubo de alimentación a pesar de que tenía el paladar quemado.
“Fue un camino muy difícil. La cantidad de quimioterapia que estaba recibiendo aniquilaba también lo que estaba bien, y eso me debilitó”, relató.
El tratamiento funcionó y el actor lleva más de dos años sin rastro de la enfermedad. Ahora debe hacerse chequeos cada seis meses.
“Pero este cáncer no se reproduce en el 95% de los casos”, precisó Douglas.
Con información de: http://www.excelsior.com.mx/funcion/2013/06/02/902084