El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció nuevas medidas para intensificar la lucha contra los cárteles del narcotráfico, como el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). La iniciativa ordena a las agencias de seguridad coordinarse para erradicar estas organizaciones criminales con un enfoque más agresivo.
Entre las acciones que se implementarán en el país vecino está la creación de un lenguaje unificado para referirse a estas organizaciones en documentos judiciales, además de un refuerzo en la investigación de casos de sobornos internacionales que faciliten las operaciones de los cárteles. También se busca que el Congreso estadounidense apruebe reformas para sancionar con mayor severidad tanto el tráfico de drogas como el de armas de fuego.
En respuesta a esta estrategia, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, pidió que Estados Unidos empiece por atender el problema dentro de sus propias fronteras. “Ellos tienen mucho que hacer en Estados Unidos. No solo se trata de cómo llega el fentanilo o cualquier otra droga a su país, sino también de quién la distribuye y la vende en sus ciudades. ¿Dónde va el dinero que generan esas ventas?”, cuestionó la mandataria.
Sheinbaum recalcó que, aunque México está dispuesto a coordinarse y colaborar con Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico, su gobierno no permitirá injerencias ni subordinaciones. “Nosotros hacemos nuestro trabajo en nuestro país, pero ¿qué pasa después de la frontera? ¿Cómo es que hay armas en México de uso exclusivo del Ejército estadounidense? ¿Quién las vendió y cómo llegaron a nuestro territorio?”, agregó.
La presidenta insistió en que la problemática del narcotráfico no es exclusiva de México y que Estados Unidos debe asumir su responsabilidad sobre las redes criminales que operan en su propio territorio. “¿Qué no hay cárteles allá? ¿No hay delincuencia organizada en Estados Unidos?”, remarcó.