El escándalo de la criptomoneda $LIBRA ha puesto al presidente de Argentina, Javier Milei, en el centro de la controversia. La criptomoneda, que tuvo un repunte en su valor tras recibir su respaldo en redes sociales, se desplomó poco después, dejando pérdidas millonarias a los inversionistas. Ante la presión, Milei intentó desmarcarse del problema asegurando que “no lo promocioné, lo difundí”.
El mandatario compartió en redes sociales un mensaje en el que hablaba sobre $LIBRA, asegurando que beneficiaría a la economía de las medianas empresas en Argentina. En su publicación, compartió un enlace del proyecto “Viva la Libertad Project”, usando su característica frase “¡Viva la libertad, carajo!”. El impacto fue inmediato: el valor de la criptomoneda se disparó y atrajo a miles de inversionistas. Sin embargo, el entusiasmo se convirtió en pérdida cuando la moneda digital cayó abruptamente, generando ganancias de hasta 100 millones de dólares a los creadores del activo digital.
Milei intentó justificarse asegurando que eliminó su tuit al notar la reacción negativa de la gente. “Nunca borro los tuits, pero como se estaba generando ruido, ante la duda dije: ‘me tengo que correr’”, explicó. A pesar de sus declaraciones, en redes sociales se filtró un video que mostraba que la entrevista en la que dio estas declaraciones estaba preparada para favorecer su imagen, y aún así no logró esquivar la polémica.
El mandatario también minimizó la cantidad de afectados por la caída de $LIBRA, afirmando que sólo unas 5,000 personas habían perdido dinero, aunque en redes sociales se manejan cifras de hasta 40,000 perjudicados. Para Milei, el tema no es su responsabilidad ni un problema del Estado, sino un asunto privado. “Si vas al casino y perdés plata, es tu problema”, fue su respuesta a quienes le reclamaban por la situación.
Según expertos, el colapso de $LIBRA no fue un accidente ni un golpe de mala suerte. Aproximadamente 40,000 compradores inyectaron cerca de 4,000 millones de dólares en la criptomoneda, pero un pequeño grupo de inversionistas retiró de golpe unos 90 millones, lo que representaba el 80% del capital circulante del proyecto. Esta acción provocó el desplome total del valor de $LIBRA, dejando sin nada a los inversores.
La controversia creció cuando se reveló que Hayden Mark Davis, creador de la criptomoneda, afirmó en un comunicado que trabaja como asesor de Milei y que forma parte de un proyecto para “tokenizar” activos en Argentina. Esto dejó entrever un vínculo más profundo entre el presidente y el proyecto $LIBRA, lo que podría traerle mayores consecuencias, ya que el caso está siendo investigado por el FBI.