Por Victoriano Martínez
Cuarenta y ocho horas antes del inicio de la primera jornada de reforestación sin precedentes en la Sierra de San Miguelito, el Diario Oficial de la Federación publicó el instrumento esperado para reforzar la conservación de esa Área Natural Protegida (ANP) en la categoría de Área de Protección de Flora y Fauna (APFF): el Programa de Manejo.
Complemento obligado del decreto de ANP, el Programa de Manejo reitera las razones por las que la Sierra debe ser protegida y, de nueva cuenta, reconoce los servicios ambientales que presta a sus pobladores, a quienes habitamos la ciudad de San Luis Potosí y a la humanidad.
Además, se enumeran los principales productos y servicios identificados por las comunidades durante los talleres participativos que se desarrollaron para la elaboración del documento: 18 tipos de alimentos, cuatro tipos de forrajes, 44 plantas medicinales, 6 tipos de materiales y 5 actividades recreativas.
“Quedan excluidas de la aplicación del presente Acuerdo y su anexo, las superficies de los predios pertenecientes a las personas, Ejidos o Comunidades Agrarias que cuenten con suspensiones en materia de amparo o que cuenten con sentencia firme y ejecutoriada en la que se les conceda el amparo y protección de la Justicia de la Unión”, señala el artículo segundo transitorio.
Una estimación de los Guardianes de la Sierra de San Miguelito, entre los ocho ejidos y comunidades agrarias son suspensiones –Escalerillas, San Juan de Guadalupe (ejido), San Juan de Guadalupe y sus Anexos Tierra Blanca y San Miguelito (Comunidad), Terrero, Aguaje, San José de Buena Vista, Estancia de Calderón y Emiliano Zapata-Jesús María– involucran más de 10 mil hectáreas de la ANP.
Se trata de casos en los que las autoridades ejidales y comunales encabezan los juicios de amparo influenciados por los desarrolladores inmobiliarios, pero enfrentan oposición entre ejidatarios y comuneros que apoyan la ANP, quienes se organizan para, en la próxima renovación de autoridades, desbancar a los personajes afines a los empresarios.
Un segundo transitorio que pudiera ser interpretado de una manera convenenciera por los desarrolladores inmobiliarios que patrocinaron los amparos de ejidos y comunidades y trataran de llevar a cabo los proyectos residenciales en diversas áreas de la APFF, aunque el documento establece zonas de influencia que limitan el alcance de esa disposición.
La elaboración del Programa de Manejo tuvo el acompañamiento de representantes de los Guardianes de la Sierra de San Miguelito, quienes en más de una ocasión presentaron sugerencia de modificaciones en el texto para impedir que los barones del concreto encontraran oportunidades para sus proyectos de depredación inmobiliaria.
En una de sus observaciones directamente relacionada con el segundo transitorio del acuerdo advirtieron que “desde el punto de vista normativo no existe en la ley el sustento para la emisión de un Programa de Manejo Parcial, lo que implica un efecto adverso a la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad”.
Se trata no sólo de una de las razones jurídicas que mantendrían a raya a los empresarios inmobiliarios, sino que mediante la determinación de zonas de influencia de la ANP se establece un cerco adicional que la protege, como ocurre con todas las áreas naturales protegidas, de cualquier riesgo de urbanización.
“Para el caso del APFF Sierra de San Miguelito, la zona de influencia se delimitó tomando como referencia los rasgos hidrológicos superficiales (microcuencas), Asentamientos Humanos, Ejidos vecinos cercanos al ANP y la zona de influencia del Parque Nacional Gogorrón. Se compone de un polígono, los cuales en conjunto abarcan una superficie total de 103,754.93 hectáreas”.
Uno de los aspectos positivos del Programa de Manejo es que reforzó la protección de los ejidos Guadalupe Victoria y la comunidad de Suspiro Picacho, del municipio de Mexquitic de Carmona, donde desde el principio fueron muy entusiastas con la ANP porque enfrentan un fuerte acoso inmobiliario en su territorio.
Como detalle: el documento confirma la presencia de pumas y ajolotes en la ANP.
Este domingo, la Sierra de San Miguelito recibirá a decenas, quizá centenas, de habitantes de la ciudad acompañados por un batallón del Ejército Mexicano para una jornada de reforestación sin precedentes.
Una buena noticia para la conservación del medio ambiente en la que los activistas ecologistas que la protagonizan irán con el incentivo para su entusiasmo de la buena nueva que representa para la Sierra la publicación del Programa de Manejo… y con la expectativa de que se avance en la declaratoria de zona de seguridad nacional, que la reforzaría aún más.
ASTROLABIO