El juzgado de oralidad tomó la determinación de no desahogar el desarrollo de la audiencia preliminar para definir si procede o no aplicar suspensión del proceso a prueba o, en su caso, un juicio abreviado para los tres primeros detenidos por el caso Rich.
La audiencia para declarar en un principio la improcedencia ocurrió el 6 de agosto pasado, pero en aquella ocasión, tanto el Ministerio Público como los imputados admitieron no tener elementos para agregar a la carga probatoria de las partes en el juicio.
Los abogados de los imputados solicitaron fijar fecha para otorgar cualquiera de los dos beneficios, al concluir la audiencia de vinculación a proceso.
Sin embargo y dado el corto tiempo entre la vinculación a proceso y la audiencia para declarar la procedencia o en su caso improcedencia, el Ministerio Público no tenía elementos para agregar a un juicio por tratarse de una investigación inicial, aún sin la totalidad de las evidencias necesarias.
En esta ocasión, el abogado de los imputados se desistió de solicitar para esta fecha, planeada desde agosto, la suspensión del proceso a prueba o el juicio abreviado.
