El cuerpo cercenado hallado la mañana de ayer en las calles de Tepito pertenece a una mujer y presuntamente antes de ser abandonado permaneció congelado, según las primeras indagatorias.
Por las características del crimen las autoridades comenzaron las investigaciones bajo el protocolo de feminicidio.
Informes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana señalan que entre una sábana de color blanco estaba el tórax de una mujer con un seno cercenado, así como el brazo derecho de la víctima.
Resalta en los informes de las autoridades la “presencia de escarcha en los tejidos” lo que supone que la víctima fue congelada antes de abandonarla en las calles.
Fue la mañana de ayer cuando un hombre en situación vulnerable, que buscaba PET entre la basura que a diario abandonan vecinos y comerciantes, encontró el bulto dentro de una bolsa de plástico. Eran cerca de las 4:30 de la madrugada de ayer, el indigente alertó a la policía acerca de un cadáver envuelto en unas sábanas tirado sobre un montón de basura en la calle González Ortega, a la altura del Eje 1 Norte, de la colonia Morelos.
Dijo que al abrirla halló la sábana blanca con manchas hemáticas y los fragmentos del cuerpo de una mujer.
Según fuentes oficiales, junto con el torso no estaban ni las piernas, ni la cabeza; además la mujer tenía cercenado un seno. Las primeras versiones indican que tampoco tenía tatuajes o algún otro indicio que ayudara a revelar su identidad.
Las autoridades ya analizan los videos de las cámaras de seguridad de la Ciudad de México, así como la de un hotel, una vecindad y al menos dos puestos ambulantes de la zona.
Apenas el pasado 1 de septiembre el cadáver de un hombre fue abandonado en un bote de basura en calles del Centro Histórico. En ese caso, las autoridades detuvieron a dos personas. Por estos hechos, dos personas —un hombre de 41 y un menor de 16 años— fueron detenidos por estar presuntamente involucrados en el abandono del cuerpo.
Cuando fueron detenidos se les aseguró un arma de fuego corta abastecía con 17 cartuchos.
Gracias a las cámaras de seguridad de la Ciudad de México, se pudo comprobar que ambos señalados transportaron el cuerpo de la víctima en un diablito. Las cámaras los captaron cuando caminaban por el Eje Central, luego cruzaron por la calle Belisario Domínguez hasta llegar a la calle de Allende. Luego continuaron hacia el callejón de María Rodríguez del Toro de Lazarín, hasta llegar al fondo de la calle donde dejaron los restos.
El Gráfico