El inicio de la Liguilla del Clausura 2024 de la Liga MX ha dejado en evidencia una preocupante ausencia de entrenadores mexicanos al frente de los equipos participantes. En un torneo donde solo cuatro directores técnicos de nacionalidad mexicana lograron mantenerse al mando de sus equipos durante toda la temporada, la falta de representación local en la postemporada ha generado un debate sobre el rol de los entrenadores nacionales en el fútbol mexicano.
El panorama se torna desolador cuando se observa que, de los ocho equipos clasificados para los cuartos de final de la Liguilla, ninguno cuenta con un director técnico de origen mexicano. Esta situación contrasta con temporadas anteriores, donde la presencia de entrenadores locales era más significativa.
El único técnico mexicano que logró colarse en el Play In fue Eduardo Fentanes, al mando del Necaxa, quien estuvo a un paso de acceder a la Liguilla tras una destacada participación en la fase previa. Sin embargo, su equipo quedó eliminado en el último partido antes de la fase final.
En contraste, los equipos que disputarán los cuartos de final de la Liguilla están liderados por entrenadores extranjeros, destacando nombres como André Jardine en el América, Martín Anselmi en el Cruz Azul, y Renato Paiva en el Toluca, entre otros.
Esta ausencia de entrenadores mexicanos en la etapa más importante del torneo ha generado preocupación entre los aficionados y analistas del fútbol nacional, quienes cuestionan las razones detrás de esta tendencia y reflexionan sobre el papel de los técnicos locales en el desarrollo del deporte en México.
