La mala planificación de la ciudad y la impunidad son los principales alicientes del crimen.
A nivel nacional, durante el último mes del año pasado, se abrieron 1,073 carpetas de investigación por violación. Este delito tiene dos clasificaciones: 847 carpetas de investigación fueron violaciones simples y 226 fueron equiparadas (usaron algún objeto). La incidencia de diciembre se coloca como la tercera menor del 2018.
El acumulado de estos ilícitos en 2018 asciende a 14 mil 558 carpetas de investigación, la modalidad de violación simple, representa el 79.63 por ciento de las violaciones totales; esta incidencia ocupa el quinto lugar de los últimos 22 años y es 8.19 por ciento superior a la de 2017, que equivale a 1,102 carpetas de investigación.
En el último mes del 2018 se abrieron 42 carpetas de investigación, superando la media nacional, que fue de 37 carpetas de investigación.
El observatorio señaló que la tasa en San Luis Potosí es de 1.70 carpetas de investigación por cada 100 mil habitantes.
Arely Torres Miranda, activista feminista y ex consejera del Instituto de las Mujeres (Inmujeres), señaló que esta violencia sexual es producto de la cultura de la violación, de la mala planificación de la ciudad y de la impunidad en el castigo a los agresores.
“La cultura de la violación es esa normalización que culturalmente se nos ha enseñado, que el cuerpo de las mujeres está disponible para su uso, es esta invisibilización de la transgresión por el cuerpo de las mujeres, se tiene como muy arraigado culturalmente, que van desde las maneras “sutiles”, que son los mal llamados piropos, hasta estos tocamientos y normalizaciones de conductas sexuales no consensuadas”.
La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), reveló que los espacios públicos es dónde ocurre mayor número de agresiones sexuales.
“La ciudad se ha vuelto un lugar muy inseguro para el tránsito de las mujeres, hemos tenido varias referencias de que mujeres han sido asaltadas sexualmente desprevenidas, en los traslados de las escuelas o de los trabajos y también tiene que ver con que no tenemos la iluminación adecuada, hay espacios que tienen terrenos baldíos, cuando nos vamos a Soledad o más hacia los extremos de la ciudad podemos ver que las mujeres tienen que caminar espacios largos que no están iluminados y están solos, eso también propicia a que se generen estos ambientes de inseguridad”, concluyó.
Fuente:Plano Informativo
