La Corte Suprema de Estados Unidos avaló este miércoles una ley del estado de Tennessee que prohíbe a menores de edad acceder a tratamientos médicos relacionados con la transición de género, como bloqueadores hormonales o terapia hormonal.
Con seis votos a favor y tres en contra, el máximo tribunal rechazó el recurso del gobierno de Joe Biden, que junto con tres familias y un médico, buscaba frenar esta medida por considerarla discriminatoria y contraria a la Constitución.
Los jueces de mayoría conservadora consideraron que la ley no viola el derecho a la igualdad establecido en la Decimocuarta Enmienda y que debe ser el pueblo, a través de sus representantes, quien decida este tipo de políticas.
¿Qué dice esta ley?
La norma, conocida como SB1, impide que médicos receten tratamientos hormonales a menores que buscan modificar su identidad de género. Tennessee defendió la medida argumentando que su objetivo es proteger a los adolescentes durante una etapa clave de su desarrollo y evitar tratamientos con efectos permanentes.
Esta ley forma parte de una tendencia nacional: más de 20 estados en EE. UU. han aprobado normas similares que restringen la atención médica de afirmación de género para jóvenes trans.
¿Qué sigue?
El fallo de la Corte Suprema sienta un precedente importante en un debate que ha generado gran controversia en los últimos años. Aunque no resuelve de fondo si estas leyes son justas o no, permite que sigan vigentes mientras continúan los procesos judiciales.
Por ahora, la decisión representa un duro golpe para las familias que buscan este tipo de atención médica para sus hijos e hijas trans, así como para el gobierno federal, que había intervenido en el caso buscando proteger los derechos de esta población.