En septiembre, Talina Fernández anunció que pasaba momentos difíciles en el plano laboral debido a que su programa Blah Blah Blah! había sido cancelado. Y es que aunque actualmente forma parte del reality MasterChef Celebrity, la conductora confiesa que está desesperada por no tener un trabajo estable.
En una entrevista para el programa Venga la Alegría, la presentadora reveló que atraviesa por una crisis económica ante la falta de trabajo, motivo por el que se ha visto obligada a vender sus joyas, abrigos de lujo e, incluso, una de sus propiedades.
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“Mi abuelo celebraba cualquier cosa regalando joyas y a mí me tocaron. Ya las vendí, pues sin lana, y también vendí los abrigos y una casa que tenía en Tequesquitengo. Siempre digo ya nació quién me tire, pero no quién me deje en el suelo”, dijo Talina Fernández.
La famosa, de 78 años, comentó que ha tenido que desprenderse de sus objetos valiosos debido a que no cuenta con un sueldo fijo, pues afirmó que los productores no le brindan oportunidades laborales debido a su avanzada edad.
“Luego que te ven mayor y creen que eres tarada o que no tienes los chincharrones como las señoritas, pues yo no tengo los chicharrones”.
La Dama del buen decir mencionó que ha podido percibir la presencia de su hija, Mariana Levy, y se ha comunicado con ella a través de señales después de que esparció sus cenizas en el bosque.
“Nos fuimos como a una como fonda grandota que hay ahí, un letrero enorme, enorme, que dice ‘Fresas con crema’, ahí estaba mi hija, me impactó, no había ningún otro letrero. Ya mi hija me está mandando el mensaje”.
Talina Fernández dice que se alejará de la prensa
La conductora se despidió de los medios por un tiempo tras la polémica en la que se vio envuelto su hijo, Coco Levy, quien enfrenta un proceso legal por el delito de abuso sexual.
“Yo ya quisiera no estar en el ojo público un rato, ya estoy cansada, sobre todo porque de repente las preguntas son las mismas (…) De repente llega un reportero y nada más le falta un trinche para poder clavártelo, creen que el micrófono les da permiso de… no señor, el micrófono te da una responsabilidad”, agregó.
Milenio