A veces cosas malas pueden pasar sin alguna razón aparente. Y no, no es mala suerte, quizá estés sufriendo de un ataque psíquico por parte de algún enemigo.
Las internaciones espirituales negativas o también llamados ataques psíquicos hacen referencia al empleo de las facultades extrasensoriales de la mente con el fin de causar daño a alguna persona, así como para contaminar las vibraciones energéticas de un lugar u objeto, explicó Gina Avilés en La Mano Peluda para Grupo Fórmula.
En estos casos, el brujo o la persona que quiere hacerte daño envía energías negativas acompañadas de odio, ira, y emociones de esta misma índole que potencian sus facultades psíquicas orientadas hacia la destrucción.
Pero no es todo, ya que en una gran cantidad de casos participan otros agentes como espíritus o demonios invocados que atormentan a la persona durante mucho tiempo.
¿Cómo puedo identificar si sufro de un ataque psíquico?
Las personas que sufren de un ataque psíquico pueden presentar cambios de comportamiento sin razón aparente, perdida de la memoria, disminución en la claridad del pensamiento y una fatiga constante.
También suelen escuchar voces, tener pesadillas frecuentes, pensamientos extraños, episodios de ira o de amargura sin motivo alguno. Si presentas algunas de estas señales, lo más seguro es que seas víctima de alguno de estos ataques.
¿Qué puedo hacer para contrarrestarlo? La mejor manera de deshacerte de estas malas energías en no pensar en ellas, luchar en contra de todos esos pensamientos y continuar con la mayor normalidad posible tu vida, pues es muy sabido que las entidades demoniacas son atraídas por el caos mental y emocional.
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