Un grupo bipartidista de 14 fiscales generales de Estados Unidos ha presentado demandas contra TikTok, alegando que la plataforma está perjudicando la salud mental de millones de niños y adolescentes. Según los fiscales, el sistema de TikTok está diseñado para fomentar un uso compulsivo, lo que genera adicción y afecta negativamente a los jóvenes.
Las demandas destacan características específicas de la aplicación que se consideran dañinas, como el desplazamiento infinito de contenido, los desafíos virales que pueden incitar a comportamientos riesgosos y las notificaciones nocturnas que alteran el sueño de los menores. Estas acciones legales son lideradas por Letitia James, fiscal general de Nueva York, y Rob Bonta, fiscal general de California, en un contexto de creciente escrutinio hacia TikTok en el país.
TikTok ha enfrentado críticas en los últimos años por diversas razones, incluyendo preocupaciones de seguridad nacional y la recolección de datos personales. Además de las actuales demandas, la plataforma se enfrenta a una posible prohibición el próximo año y a una acción legal del Departamento de Justicia por la recolección ilegal de datos de niños.
Letitia James expresó en un comunicado que TikTok está explotando la salud mental de los menores, priorizando las ganancias sobre la seguridad de sus usuarios. En 2023, TikTok reportó ingresos de 16 mil millones de dólares en EE. UU., con 2 mil millones de dólares generados solo en publicidad dirigida a adolescentes en 2022.
Los fiscales también critican el uso de filtros de belleza en la aplicación, que distorsionan las imágenes de los usuarios y fomentan comparaciones sociales dañinas, contribuyendo a problemas de imagen corporal y trastornos mentales. Además, los desafíos virales, como el trágico caso de un adolescente de Brooklyn que murió participando en el “subway surfing”, han puesto de relieve los peligros asociados a la plataforma.
Las demandas también acusan a TikTok de violar la Ley de Protección de la Privacidad Infantil en Línea (COPPA) al permitir el acceso a menores de 13 años sin el consentimiento de los padres. A pesar de que TikTok afirma que no permite el acceso a niños en este grupo de edad, los fiscales argumentan que la plataforma presenta contenido y anuncios dirigidos a ellos.
TikTok, por su parte, ha defendido su postura, señalando que las acusaciones son inexactas y engañosas. Un portavoz de la compañía afirmó que han colaborado con fiscales generales para abordar estos desafíos y que han implementado medidas de seguridad, como límites de tiempo de pantalla y herramientas de supervisión parental. Sin embargo, los fiscales consideran que estas medidas son insuficientes y buscan imponer sanciones financieras a TikTok, así como el reembolso de las ganancias obtenidas de anuncios dirigidos a adolescentes y preadolescentes.