En casi un mes, el 21 de diciembre para ser exactos, comienza la estación invierno. Las temperaturas irán en descenso, las vacaciones y la época navideña también se harán presentes para tener un ambiente acogedor en los hogares con el calor de la familia, un buen baño caliente, una buena taza de ponche caliente con galletitas de horno, todo para refugiarse del frío. ¿Lo imaginas? Pero, ¿qué pasa si no sale el agua? ¿no hay gas?
Es momento de prevenir un escenario caótico. Porque aún faltan unos días para la temporada invernal pero los frentes fríos ya están aquí y han llegado con temperaturas congelantes, lluvias y neblinas. Es importante por ello hacer una revisión de las instalaciones de las tuberías del agua y del gas para protegerlas del frío.
¿Del frío? Leíste bien. Y no es que pensemos en abrigarlas, pero es en esta época cuando la temperatura del agua en las tuberías a la intemperie o en espacios como las azoteas, jardines, patios, terrazas o paredes externas ocasionan que desciendan hasta los cero grados o menos, iniciando un proceso de congelamiento y que incluso puede dañar el tubo además de afectar la disponibilidad del agua en los hogares. Esto es, porque el hielo se expande e incrementa la presión en las líneas que conducen y distribuyen el agua potable originando fisuras y roturas.
¿Qué hacer para evitar el congelamiento en las tuberías?
Algunos sitios de internet especializados comparten las recomendaciones prácticas para prevenir y evitar que pases un invierno sin agua. Entre las más destacadas están las siguientes:
1.- Aislar instalaciones: Envolver las tuberías empleando materiales aislantes como cinta impermeable, periódico, plástico, papel, telas gruesas o productos especializados que venden en ferreterías y almacenes.
2.- Vaciar las tuberías: Cerrar la llave de paso de la toma que esté al exterior y cortar el suministro hacia depósitos de agua, aspersores o tomas a la intemperie. Retirar y guardar todas las mangueras que se usen en jardines y terrazas para impedir que se dañen.
3.- Vigilar el estado de las tuberías y reparar fugas: Cualquier escape de agua es un punto crítico de congelamiento. Sellar las grietas en paredes donde hay fontanería también es clave para evitar un descenso mayor de la temperatura al interior del inmueble. Si observas un tubo roto, llama a un fontanero de garantías para que se haga cargo de forma profesional si quieres evitar problemas mayores.
4.- Abrir los estantes de la cocina: Cuando la temperatura descienda notoriamente, es recomendable abrir cajones o gabinetes ubicados bajo el fregadero de trastes, para hacer circular el aire caliente que ya esté dentro de la vivienda y evitar que las tuberías de agua se congelen.
5.- En caso que alguna tubería llegue a congelarse se recomienda envolverla con toallas previamente mojadas en agua tibia. Para descongelar las tuberías evitar el uso de cualquier dispositivo que genere una flama o llama.
En algunos sitios recomiendan el uso de una válvula de recirculación de agua caliente con control de temperatura por convección termal. Es un artefacto que no requiere de electricidad para funcionar, y que hará que circule continuamente agua tibia a través de las líneas de agua cada vez que la temperatura esté en descenso. A diferencia de la cinta térmica, la cual solo calienta las tuberías, este proceso hace circular el agua sin interrupción para evitar la cristalización y congelación, sin importar si las tuberías se encuentran ocultas.
Lo mismo pasa con las tuberías del gas, por lo que también puedes realizar la supervisión y tener así un invierno cálido dentro de tu hogar.
Lasiilarotahidalgo
