Para evadir el pago de derechos con el organismo operador responsable, el fraccionamiento Villa Magna ideó su tiradero a cielo abierto de las aguas residuales… en terrenos que usa otra empresa.
La desembocadura de las aguas residuales se encuentra en el Tanque “Capulines”, propiedad de la Industrial Minera México. Solicitar permisos para la descarga de aguas residuales a través de canales con destino en cuerpos de agua forma parte de las competencias de la Comisión Estatal del Agua.
Los fraccionamientos Horizontes y Villa Magna extraen de pozos propios el agua potable, sin contar con una concesión ni con tratos con el Interapas.
El terreno donde son depositadas las aguas residuales a través de un canal no le pertenece y sin embargo, la zona podría representar un riesgo sanitario en caso de contacto directo con personas a los alrededores.
El manejo privado del agua en la zona metropolitana de San Luis Potosí únicamente es legal para una concesión otorgada la década pasada a la empresa Aguas del Poniente Potosino, que presta sus servicios para los fraccionamientos la Loma Residencial de Golf, La Loma, La Loma Centro Deportivo y fraccionamiento Rinconada de los Andes.
Aguas del Poniente Potosino extrae el agua de los pozos que tiene concesionados por la Comisión Nacional del Agua, la potabiliza, la distribuye entre las tomas domiciliarias de su jurisdicción y tiene su propio sistema de tratamiento de aguas residuales.
Sin embargo, en el caso de los fraccionamientos Horizontes y Villa Magna, su descarga llega al tanque ubicado detrás de la Planta Electrolítica de Zinc, en el costado opuesto del anillo periférico, sin que tenga algún tratamiento.
