Hwaseong, Corea del Sur – Un devastador incendio en la fábrica de baterías de litio Aricell en Hwaseong ha resultado en la muerte de 23 trabajadores, la mayoría de ellos ciudadanos chinos, tras una serie de explosiones que arrasaron la instalación. El incidente ocurrió el lunes por la mañana después de que múltiples celdas de batería explotaran dentro de un almacén que almacenaba unas 35 mil baterías.
Las autoridades han señalado que las víctimas, incluidos 17 trabajadores chinos, cinco surcoreanos y uno originario de Laos, probablemente sucumbieron rápidamente a los gases tóxicos generados por el fuego. El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, visitó el lugar del accidente, mientras que el CEO de Aricell, Park Soon-kwan, expresó sus condolencias y afirmó que la empresa había seguido estrictas medidas de seguridad y formación.
El incidente ha conmocionado a la comunidad local, generando preocupaciones sobre las normas de seguridad y la capacitación adecuada, especialmente para los trabajadores temporales. La investigación está en curso para determinar las causas exactas del incendio, que se extinguió después de seis horas de esfuerzos intensivos de extinción.
Aricell, fundada en 2020, se especializa en la producción de baterías primarias de litio y es propiedad mayoritaria de S-Connect. El gobierno surcoreano ha intensificado sus esfuerzos para mejorar la seguridad industrial, especialmente después de una serie de tragedias similares en el pasado.
Este trágico incidente subraya los riesgos asociados con la producción de baterías de alta tecnología, que utilizan materiales altamente inflamables y tóxicos.