Transportaba toneladas de cemento y en una curva perdió el control.
El chofer de un tráiler murió aplastado por su unidad en la carretera de cuota Valles-Rayón; en una curva perdió el control del volante y volcó su unidad, pero el infortunado se salió por la ventanilla y fue arrollado.
Ayer en la mañana se suscitó el accidente en el kilómetro 32 de la carretera federal número 70-Delta, también llamada Autovía, cerca de las casetas del poblado El Clarín, donde falleció Pedro Enrique Juárez Molina, contaba con 32 años de edad, y tuvo su domicilio en avenida Julio R. Córdoba del fraccionamiento La Virgen, en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez.
El hombre guiaba un tráiler marca International color blanco, tipo góndola, con razón social Tramo del Centro S.A. de C.V., en el que transportaba varias toneladas de cemento.
Circulaba con dirección de Rayón hacia Ciudad Valles, pero aparentemente no respetó los límites de velocidad, por eso al tomar una curva perdió el control de la unidad y volcó sobre el costado izquierdo.
Era tanta la velocidad, que el tractocamión se fue arrastrando varios metros, pasó sobre la barrera de contención y finalmente se salió del camino. En el trayecto, el chofer salió proyectado por la ventanilla y su unidad le pasó literalmente por encima, falleciendo de manera instantánea.
Casualmente por el sitio iban pasando elementos de la Policía Federal, quienes de inmediato bajaron de la patrulla y al ver que el trailero estaba muerto, procedieron a acordonar el área, y solicitaron apoyo al personal de la Autovía para dar vialidad.
Posteriormente arribaron las autoridades ministeriales, quienes se encargaron de levantar el cadáver y llevarlo al Servicio Médico Forense (Semefo) de Ciudad Valles, para los trámites correspondientes.
Las maniobras para retirar el tractocamión se prolongaron varias horas, aunque para fortuna de los automovilistas, sólo un carril se cerró parcialmente, y no afectó la circulación.
Fuente: Pulso