La posible venta de Warner Bros. Discovery se ha vuelto aún más complicada después de que Donald Trump asegurara que piensa involucrarse en el proceso. Su interés no solo tiene que ver con el tamaño de la operación, sino también con su deseo de influir en quién controlará a CNN, una cadena con la que ha tenido conflictos durante años.
El expresidente insiste en que CNN debería cambiar de dueños y de manejo interno. Incluso afirmó que la cadena es dirigida por “un grupo muy deshonesto” y que lo mejor sería venderla junto con el resto de los activos de Warner Bros. Su secretaria de prensa, Karoline Leavitt, respaldó esta postura y comentó que Trump cree que la cadena “se beneficiaría de una nueva propiedad”.
Mientras tanto, la competencia entre Netflix y Paramount Skydance por quedarse con los activos de Warner Bros se ha vuelto más intensa. El codirector de Netflix, Ted Sarandos, ha buscado acercarse a Trump, reuniéndose en varias ocasiones con él y recordándole que la familia del expresidente es fan de la plataforma. El gigante del streaming también ha fortalecido su equipo de cabildeo en Washington para ganar terreno en un momento donde el poder político está nuevamente alineado con Trump.
Por su parte, la oferta de Paramount tiene un punto clave: involucra a Jared Kushner, yerno y exasesor de Trump. Kushner ha apoyado al director de Paramount, David Ellison, en la gestión de la financiación necesaria. Además, el padre de David, Larry Ellison, es un conocido donante y simpatizante de Trump, lo que alimenta la percepción de que esta propuesta podría tener un camino más favorable.
Al hablar del tema, Ellison mencionó que ha mantenido “excelentes conversaciones” con Trump sobre la posibilidad de hacerse de CNN, aunque evitó decir más para no hablar en su nombre. También destacó que, si Paramount concretara la compra, no sería extraño ver una reestructuración similar a la que aplicaron cuando tomaron control de CBS News, donde contrataron a Bari Weiss, una figura conocida por su postura anti-woke.
En medio de las negociaciones, los temas antimonopolio son parte del debate. De acuerdo con Jennifer Rie, analista de Bloomberg Intelligence, Paramount tendría más probabilidades de recibir una aprobación rápida del gobierno que Netflix, tanto por cuestiones de competencia como por el aparente respaldo que tiene de la administración. Sin embargo, las declaraciones de Trump han generado dudas sobre si realmente está preocupado por la concentración en el mercado o si simplemente busca favorecer al comprador que más le conviene políticamente.
Legalmente, Estados Unidos impide fusiones que reduzcan la competencia o generen monopolios. Trump aseguró que quiere revisar el impacto que tendrían Netflix y Paramount en el mercado, pero al día siguiente dejó claro que su opinión se inclina hacia quién podría darle un nuevo rumbo a CNN.
Para Trump, esta venta representa una oportunidad para transformar el panorama mediático tradicional, uno que ha criticado por años. Y aunque sus palabras han empujado el proceso hacia terrenos inciertos, también han dejado ver que su prioridad no es solo el negocio, sino el control del contenido y la narrativa que lo rodea.
