Trump inaugura prisión migratoria “Alligator Alcatraz”, rodeada de caimanes en Florida

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, encabezó la apertura de un nuevo centro de detención de migrantes en los Everglades de Florida, conocido como “Alligator Alcatraz”, una instalación rodeada de terrenos peligrosos y fauna salvaje, que según sus impulsores, busca reforzar la política de deportaciones masivas.

Ubicado en el antiguo Aeropuerto Dade-Collier, el complejo albergará hasta 5 mil personas y ya comenzó operaciones. Esta prisión migratoria forma parte del ambicioso plan de Trump para acelerar las deportaciones y ampliar la capacidad de detención en el país.

Durante el recorrido inaugural, Trump calificó la ubicación como “ideal”, asegurando que su aislamiento y el entorno hostil funcionarán como una medida natural de seguridad. “Hay muchos caimanes, muchos policías disfrazados de reptiles. Es el lugar perfecto para mantener a la gente donde debe estar”, dijo en tono irónico.

La Casa Blanca, a través de su vocera Karoline Leavitt, señaló que el presidente busca promover esta iniciativa como parte clave de su propuesta legislativa de seguridad migratoria. Además, destacó que la remota ubicación del centro representa una alternativa “eficaz y de bajo costo” para contener a migrantes con antecedentes criminales.

El proyecto, que costará alrededor de 450 millones de dólares al año, cuenta con el respaldo del gobierno de Florida, y parte del financiamiento proviene de programas federales como FEMA. El fiscal general de ese estado, James Uthmeier, aseguró que el aislamiento del lugar “reduce costos de seguridad” al estar rodeado de caimanes y pitones, impidiendo posibles fugas.

Acompañaron a Trump en la visita la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kristi Noem; el gobernador Ron DeSantis y el congresista Byron Donalds. Noem declaró que este centro permitirá “encerrar a algunos de los peores criminales que ingresaron durante la administración pasada” y prometió expandir instalaciones similares.

Sin embargo, el proyecto no ha estado libre de críticas. Organizaciones ambientalistas presentaron demandas por considerar que la prisión fue construida en un área protegida que alberga especies en peligro de extinción. Además, nativos americanos y activistas por los derechos humanos protestaron en las inmediaciones del sitio el fin de semana, denunciando la criminalización de la migración y la afectación a territorios ancestrales.

“Alligator Alcatraz” se suma a las controvertidas estrategias migratorias de Trump, que también incluyen el uso de Guantánamo y prisiones extranjeras para alojar a migrantes, bajo la promesa de “hacer a Estados Unidos seguro otra vez”

Compartir ésta nota:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp