Los daños se registraron en una finca de Universidad e Independencia.
Operadores de un autobús turístico que circula por el Centro Histórico son señalados como probables responsables de los daños causados a la cornisa de un edificio con más de 150 años de antigüedad y retirarse sin reparar la afectación causada.
Se trata de un inmueble ecléctico, donde predomina el estilo neoclásico, donde aún se encuentra una tienda muy antigua que ahora utiliza Miguel Mendoza, propietario de un negocio de paletería y nevería.
El arquitecto Jorge Castro y empleados de la nevería explicaron que el lunes el conductor del camión turístico no vio que los cables de telefonía se encontraban a baja altura y los arrastró hasta derribarlos, cargando con una parte de la cornisa que remata la construcción antigua en la intersección del Callejón Universidad y la calle Independencia.
Los empleados explicaron que el propietario de la paletería solicitó a la empresa de telefonía la reparación de los cables derribados por el camión y la única solución que se les ocurrió fue colocarlos por encima de la finca donde se ubican la antigua casa y el negocio.
El arquitecto, cuya esposa es familiar de los propietarios de la finca, explicó que la empresa turística no regresó para reemplazar las piezas de cantera perdidas en la cornisa que por años se mantuvo íntegra y sin mayores daños que los causados por la exposición a la intemperie.
Fuente: Pulso