Durante el equinoccio de primavera, un turista alemán subió ilegalmente la pirámide de Kukulkán, en la zona arqueológica de Chichén Itzá, desatando una serie de reacciones tanto de los presentes como de las autoridades. El evento, uno de los más importantes de Yucatán, atrae a miles de personas, y en esta ocasión se esperaba el fenómeno de la Serpiente Emplumada, donde la luz y la sombra se alinean en la escalinata norte de la pirámide.
Aunque había un operativo de seguridad para prevenir incidentes, el turista logró esquivar a los guardias y trepó la pirámide. La acción fue rápidamente captada por los asistentes, quienes compartieron el video en redes sociales. De acuerdo con los testigos, el hombre subió rápidamente y trató de esconderse en la cima, pero fue perseguido por los guardias y obligado a descender.
Al llegar al suelo, el extranjero fue recibido por una multitud enfadada, que lo insultó y agredió físicamente. Durante el altercado, el turista sufrió una herida en la frente. Fue entonces cuando personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y miembros de la Guardia Nacional intervinieron para proteger al hombre y evitar que la situación escalara más.
Desde el 2006, está prohibido subir a la pirámide de Kukulkán para preservar tanto el patrimonio cultural como la seguridad de los visitantes. Esta restricción se implementó luego de varios incidentes previos que comprometieron la estructura y a los turistas.
En cuanto a las consecuencias, subir a la pirámide puede acarrear una multa económica, que varía entre 5,000 y 50,000 pesos mexicanos, dependiendo de los daños ocasionados por la infracción.
