A un día de la aplicación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 16% por parte de la Servicio de Administración Tributaria (SAT) a alimentos como: tacos, pizza, burritos, tamales, hot dog, catedráticos de la Facultad de Economía de la UASLP calificaron como un obtuso parche a la economía, esta clase de medidas realizadas por la Secretaría de Hacienda.
Los Maestros José Benigno Martínez Bear y Luis Francisco Mendoza Barraza reconocieron que la dependencia federal está aplicando una especie de “remiendo económico”, que va en contra de toda clase de teorías, pues en un principio la dependencia federal explicó que el pago de dicho impuesto no se había cobrado y estratégicamente se aplica luego del paso de los procesos electorales en el país.
El Mtro. Francisco Mendoza puntualizó que la decisión lleva implícito un grado de desatención, a los trabajos que realiza el SAT, pues pareciera una ocurrencia que termina por justificar el hecho de no están realizando bien su trabajo, pues desde un principio no se cobran los impuestos que se deben cobrar.
Destacó que los funcionarios dejaron pasar los días electorales, pero seguramente se dieron cuenta antes y no aplicaron la medida inmediatamente para no verse afectados en dichos procesos.
Mencionó que la medida aunque pretende aparentar una especie de justicia para cobrar a todos, y no sólo a las papas fritas y refrescos; los más afectados serán los consumidores pues el alza de los productos como tacos, pizza, hotdog, tamales, y tortas se verá próximamente.
Comentó que las tiendas de conveniencia que venden dichos productos, verán poco a poco se van mermando la venta, pues el consumidor a la larga no podrá pagar la misma cantidad porque todo subirá.
El Mtro. José Benigno Martínez dijo que con el alza del 16% a los productos T, lo único que adelgaza es la cartera de los consumidores, por lo que ahora puede calificarse como un impuesto al hambre y no tanto a los productos.
Los economistas aseguraron que el que suban los precios y que ello implique pagar más por el mismo producto, implica la creación de inflación, la cual puede subir pese a que las calificadoras están trastocando los números de la economía mexicana, de tal manera que siempre esté dicho indicador entre el 3 y el 4% lo cual más o menos mantiene a flote las proyecciones económicas.
Los catedráticos auguraron que con estos pequeños impuestos se comienza a generar que se puedan presentar problemas en el futuro y por ende en el resto del año, pues se han anunciado una serie de medidas que afectan a los más pobres y que continúan marcando la desigualdad entre los que más tienen y los que no.
Fuente: La Razón