La vuelta al colegio se convierte en un desafío económico para las familias, especialmente cuando se trata de adquirir uniformes escolares. Sin incluir cuotas de inscripción y colegiaturas, un padre de familia podría gastar hasta 3,500 pesos solo en vestimenta y mochilas para un hijo en primaria o secundaria. En el caso de preparatoria, los precios pueden ser aún mayores.
Un padre de familia que pretenda comprar uniformes para uno solo de sus hijos que curse primaria o secundaria, nada más en la vestimenta de gala se puede gastar de 600 a 800 pesos, según la talla y la calidad del producto.
Sumado a esto, el uniforme deportivo, cuyo precio también varía según el establecimiento y la calidad del producto, puede costar entre 600 y 800 pesos. En algunos casos, cuando los uniformes son muy sencillos, también están disponibles a precios de hasta 500 pesos como mínimo.
Sin embargo, si un padre de familia se gasta 1,600 pesos en los uniformes, y le agrega un aproximado de 800 pesos por los zapatos escolares de buena calidad, más 400 pesos del costo de los tenis, y algunas mochilas cuestan 400 pesos, pero la compra de calcetas y prendas interiores puede provocar un gasto aproximado de 300 pesos, la cantidad total alcanza los 3,500 pesos.
Aunque los precios varían significativamente, en promedio, un uniforme de muy bajo precio cuesta 600 pesos y puede bajar a 500 o 550, según las posibilidades del minorista para venderlos.
Este considerable gasto representa un reto adicional para muchas familias, que deben ajustar sus presupuestos para cubrir las necesidades básicas de sus hijos durante el inicio del ciclo escolar.
