Padres de Familia Denuncian Falta de Registro Oficial de Validez
Un grupo de padres de familia de estudiantes de Medicina en la Universidad Potosina se manifestó recientemente, alegando que la institución privada ha defraudado a casi 1800 alumnos al no contar con el Registro de Validez Oficial (REVOE). Esta situación ha impedido que los graduados reciban sus certificados necesarios para ejercer la profesión.
Susana García Guerrero, portavoz de los padres afectados, indicó que desde el semestre anterior se dieron cuenta de la ausencia del registro. Al cuestionar a Kevin Fabián Elías Alfaro, un funcionario de la universidad, recibieron respuestas evasivas y engañosas. “Fue como darnos atole con el dedo”, afirmó García Guerrero, relatando cómo inicialmente se acercaron a la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado (SEGE), y se les aseguró que todo estaba en orden. Sin embargo, la realidad se desveló cuando alumnos de octavo semestre fueron rechazados de sus servicios sociales en instituciones de salud por no estar reconocidos.
Al percatarse del problema, algunos padres buscaron otras universidades para transferir a sus hijos. Sin embargo, todas las instituciones consultadas informaron que la Universidad Potosina no contaba con el REVOE para la Licenciatura en Medicina, lo que impedía la revalidación de materias y tiempo de estudio.
Desesperados, los estudiantes y sus familias realizaron múltiples visitas a la SEGE sin recibir atención adecuada. Finalmente, decidieron manifestarse en la Avenida Carranza, lo que obligó a las autoridades a prestarles atención y programar una reunión para abordar el problema.
Se estima que aproximadamente 1800 estudiantes serán afectados por esta situación. Además, los padres denuncian cobros excesivos para la obtención de documentos de sus hijos. Critican al rector Arturo Segoviano por permitir que la universidad opere sin el registro necesario. “Es inadmisible, no podemos permitirlo”, exclamó García Guerrero, enfatizando la invalidez de los estudios realizados sin el REVOE.
La situación ha generado gran preocupación y descontento entre las familias afectadas, quienes ahora buscan una solución viable para no perder los años de estudio de sus hijos. Exigen que las autoridades y la universidad tomen medidas inmediatas para resolver esta grave irregularidad y garantizar el futuro académico y profesional de los estudiantes defraudados.