Dice directivo que es viable reestructurarla a un plazo de 20 años; recomienda contener todavía más el gasto y la nómina, para mejorar el flujo de efectivo municipal. La calificadora HR Ratings consideró viable el plan del Ayuntamiento capitalino de reestructurar la pesada y cara deuda de corto plazo que dejó Victoria Labastida, para cambiarla por otra de largo plazo, cuyos intereses sean más aceptables y un programa de pagos acorde con el flujo de efectivo municipal, señaló en entrevista con Exprés el director ejecutivo de finanzas públicas de la firma, Ricardo Gallegos.
La calificadora HR Ratings consideró viable el plan del Ayuntamiento capitalino de reestructurar la pesada y cara deuda de corto plazo que dejó Victoria Labastida, para cambiarla por otra de largo plazo, cuyos intereses sean más aceptables y un programa de pagos acorde con el flujo de efectivo municipal, señaló en entrevista con Exprés el director ejecutivo de finanzas públicas de la firma, Ricardo Gallegos.
Señaló que eso se reflejaría en mejores finanzas públicas y mayor liquidez, además de reconocer que las acciones que ha realizado hasta el momento el Ayuntamiento son las correctas: reducir nómina y gasto, para atender la emergencia financiera que recibió, además de emprender la renegociación del débito. HR Ratings asignó recientemente al Ayuntamiento una calificación BB con perspectiva estable, que es mucho mejor que la heredada por Victoria, que era la más baja posible. Pero aún así, considera que el municipio ofrece insuficiente seguridad para el pago oportuno de sus obligaciones de deuda y mantiene alto riesgo crediticio.
Gallegos señaló que es indispensable realizar acciones para una todavía mayor contención de gastos, no sólo de inversión, sino corriente, además de la urgente reestructuración de la deuda. Señaló que la contención del gasto se refiere a no elevar la nómina principalmente y, si se puede, despedir más personal. También bajar el gasto operativo, que consiste en telefonía, papelería, vehículos. La inversión en obra pública debe también limitarse, es decir, aprobar y realizar únicamente aquellas acciones más indispensables para los capitalinos.
En lo que se refiere a la reestructuración de la deuda municipal, consideró que uno de los aspectos positivos que podrían ayudar al municipio a restaurarse económicamente es que no se debe de tomar como un financiamiento adicional, sino usarse para pagar saldos actuales. Señaló que una reestructura a un mayor plazo se reflejaría de inmediato en una mejor salud de las finanzas municipales.
Gallegos argumentó que el tema de la la reestructuración de la deuda, que se presume se realizará a un plazo a 20 años, debe acompañarse de otras acciones paralelas, como la contención de la nómina, gasto corriente e inversión. Aseveró que, con antelación, el Ayuntamiento de la capital había tomado acciones tangibles para sobrellevar su situación financiera, que dejó muy maltrecha la administración anterior. Confió en que se rindan buenos resultados, los cuales se podrán lograr con la contención de gasto, por un lado, y, por otro, una posible mayor gestión de recursos de los gobiernos estatal y federal.
PESADA DEUDA
Al cierre de 2012, las arcas municipales debían:
> 483.6 MDP en deuda.
> 120 MDP en créditos a corto plazo.
> 363.3 MDP a largo plazo.
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