Con el apoyo de la tecnología, el gobierno federal y la industria de vinos y licores en México, combatirán el mercado ilegal que representa 43% del total y pérdidas al fisco por 6 mil 300 millones de pesos por medio del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS).
A través de un nuevo marbete (etiqueta) que llevarán las botellas con un código QR que podrá ser leído por aplicaciones gratuitas teléfonos inteligentes, se podrá detectar si una bebida es de dudosa procedencia por estar adulterada o porque no ha pagado los gravámenes.
Lo anterior le dará cierto poder a la gente de asegurarse de que lo que está adquiriendo es legal, aseguró el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, durante la presentación de la aplicación que forma parte del programa Juntos contra la Ilegalidad que ya opera para las industrias del textil y del calzado.
“Este marbete trazable que tiene esta funcionalidad, que empodera al ciudadano es resultado de un trabajo conjunto entre la industria de vinos y licores, el sector privado y el gobierno”, explicó.
Refirió que tradicionalmente los consumidores se fijan en que las botellas contengan esa etiqueta de seguridad, pero ahora gracias a la tecnología “tendrá el poder, al tomar la decisión de comprar un producto, de verificar directamente si es o no legal”.
Explicó que de lo que se trata es que la gente conozca que al comprar una botella de vino, tequila o licor pueda “simplemente acercar su teléfono a la botella, dirigirla al marbete, al código QR y, a través de una aplicación gratuita, que hay muchas, que se pueden bajar al teléfono, distinguir en unos cuantos segundos si se trata de una bebida legal, ya sea legalmente importada o legalmente producida en México”.
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Distribuidores de Vinos y Licores (Andivyl), Ángel Abarrategui, aseguró que las bebidas alcohólicas ilegales representan 43% del mercado total y equivale a alrededor de 187 millones de litros.
El Secretario de Hacienda aprovechó para dar un reporte de los resultados que se han obtenido en los programas al combate al contrabando técnico en los textiles y calzado.
Se tiene una reducción de 78% en la importación de calzado subvaluado, y al mismo tiempo crecieron 26% en las exportaciones de esos productos hacia Estados Unidos.
La industria textil y del vestido se favoreció por la disminución de 90% en las importaciones de mercancías que entraban al país con un precio declarado menor al de su valor.
Con información de: Universal